El Nápoles cierra el año con la lengua fuera y en mala racha

Las lesiones de jugadores clave han mermado al cuadro partenopeo, lanzado en el inicio del curso

La primera derrota liguera coincidió con el debut de Xavi en el Barça y las dinámicas se han invertido

Dries Mertens, jugador del Nápoles, durante una acción del partido ante el Empoli

Dries Mertens, jugador del Nápoles, durante una acción del partido ante el Empoli / AFP

X. Serrano

El barcelonismo se echó las manos a la cabeza el pasado 13 de diciembre cuando el sorteo de la Europa League emparejó al Barça con el Nápoles, el adversario más poderoso entre los que podían salir. El cuadro partenopeo, al contrario que el Barcelona, había empezado la temporada como un tiro. Lideró la Serie A de la cuarta a la decimoquinta jornada, con pleno de victorias en los ochos primeros encuentros y manteniéndose invicto hasta la fecha 13.

Sin embargo, las tornas cambiaron el fin de semana del 20 y 21 de noviembre. El sábado, Xavi Hernández debutaba en el banquillo azulgrana con una victoria en el Camp Nou frente al Espanyol (1-0). Y el domingo, el Nápoles perdía contra el Inter (3-2) su primer partido en la Serie A.

Las tendencias de ambos equipos se invirtieron. Mientras que el Barça ha crecido con el nuevo técnico, el Nápoles cedió el liderato poco después y su balance desde aquella primera caída es de dos triunfos, un empate y tres derrotas. 

En diciembre, el cuadro campano perdió ante dos rivales incómodos pero inferiores como el Empoli y el Spezia (ambos por 0-1, con un gol de rebote y el otro en propia puerta), se dejó remontar un 2-1 por la Atalanta (2-3) y empatar un 0-2 por el Sassuolo (2-2), y solo ganó al Milan (0-1) gracias a un gol anulado a los ‘rossoneri’ en el último minuto. “Hemos acusado el cansancio. Es hora de reorganizar la moral del equipo, que está un poco abatido”, dijo el técnico Luciano Spalletti tras caer ante el Spezia con 25 tiros a favor y 0 en contra.

Muy mermado por las lesiones

El bajón en las prestaciones del Nápoles se debe principalmente a las lesiones de cinco titulares indiscutibles: el referente defensivo Kalidou Koulibaly, la sala de máquinas compuesta por Fabián Ruiz y Zambo Anguissa, el capitán y principal generador ofensivo Lorenzo Insigne, y el goleador Victor Osimhen. El cansancio acumulado y el menor nivel de los suplentes hicieron el resto. 

Sin embargo, el parón invernal ofrece al conjunto campano un respiro que venía necesitando tanto a nivel físico como mental. Spalletti recuperará a los lesionados y hasta el 17 de febrero, día en el que visitará el Camp Nou, el Nápoles tiene siete partidos para recobrar sensaciones.

Hace pocos meses, el cuadro partenopeo, que pese al bajón es la mejor defensa del ‘calcio’ con 14 goles encajados en 19 duelos, fue un bloque granítico y con múltiples recursos ofensivos. Peligroso en el golpeo lejano y a balón parado, capaz de dominar y contragolpear. Veremos cómo llega a febrero. 

La Copa África, factor de desgaste

El Nápoles se verá seriamente afectado por la disputa de la Copa África, que da comienzo el 11 de enero y termina el 6 de febrero -a once días del primer cara a cara frente al Barcelona- con la celebración de la final. De sus titulares indiscutible, el cuadro campano perderá con total seguridad al defensa Kalidou Koulibaly, convocado con Senegal, y al centrocampista Zambo Anguissa, llamado por Camerún. Ambos, jugadores que han estado lesionados recientemente.

El caso del nigeriano Victor Osimhen es incierto. Tras fracturarse el pómulo el 21 de noviembre frente al Inter, el Nápoles informó que el tiempo de recuperación serían tres meses. Sin embargo, el atacante, que ya se ejercita con una máscara, declaró en la redes sociales que irá si le convocan.