La Juventus no falla y avisa al Barça

Cuadrado celebra su gol, que dio la victoria a la Juventus

Cuadrado celebra su gol, que dio la victoria a la Juventus / EFE

Mar Bianchi

Mar Bianchi

“Hablar ahora del Barcelona no tiene sentido”. Tras conocerse el cruce de cuartos entre ‘bianconeri’ y culés, el técnico Max Allegri ha querido desde el primer momento hacer un llamamiento a la calma. “Faltan 15 días y tenemos cuatro partidos que afrontar”, comentó el entrenador de la Juventus en la previa del choque ante la Sampdoria.

Los turineses saben que cada vez tienen más cerca su sexto ‘Scudetto’ consecutivo y quieren que llegue cuanto antes. No hay tregua, ni siquiera días antes del parón de selecciones. En el estadio Luigi Ferraris de Génova, la Juventus debía continuar con su ruta.

Comenzó bien la Sampdoria, de hecho Quagliarella puso en dificultad a la defensa juventina. Pero el poder de la Juventus y las jugadas entre AlvesPjanic y Dybala siempre acababan en ocasión de peligro.

El gol de la Juventus fue muy tempranero. En el minuto 7, Asamoah por la banda izquierda dio a Cuadrado la asistencia perfecta para anotar de cabeza. Pocos minutos después, entre Higuaín y Mandzukic estuvo el 0-2, pero la atajó Puggioni. Para los ‘blucerchiati’, el gol frenó su juego, la intención de los primeros minutos seguía pero cada vez les costaba más producir.

El punto de inflexión llegó en el minuto 27, cuando Paulo Dybala pidió el cambio. Él solo le tiró al suelo, Pjanic llegó rápidamente a hablar con él y el fue el bosnio quien, con el puño cerrado, hizo un gesto para ilustrar un agarrotamiento muscular.

Segundos después, ‘La Joya’ pidió el cambio. La primera impresión fue alarmante, pero al término de la primera mitad el atacante argentino se quitó el hielo y comenzó a andar casi sin ninguna dificultad. A la espera de novedades, parece que se puede perder los partidos con Argentina.

Pese a notarse la ausencia de Dybala, la Sampdoria no aprovechó el momento, dejaba demasiado espacio a la Juventus. En la segunda parte, el desarrollo del encuentro fue bastante tranquilo. Quizá demasiado.

La Juventus dominaba y tampoco buscaba con ahínco el segundo gol para cerrar el partido. En la otra mitad del césped, Muriel, Quagliarella o Schick se topaban en repetidas ocasiones con la sólida defensa de Allegri.

La ventaja provocó que en los últimos minutos del choque en Marassi la Juventus bajase el ritmo, tanto que en el descuento los genoveses tuvieron un par de ocasiones que sacaron a Allegri de sus casillas. No obstante, ya tenían los tres puntos en el bolsillo.

Los principales problemas a los que se tendrá que enfrentar el Barcelona será el muro defensivo de la Juventus, los de Turín solo han recibido cinco goles en los últimos 14 partidos y las variantes tácticas de Allegri, camaleónicas y siempre eficaces.