El Inter remonta en Florencia como un campeón

Los 'nerazzurri' voltearon el partido con goles de Darmian, Dzeko y Perisic (1-3)

Handanovic evitó en la primera parte la goleada del cuadro 'viola', que abrió la lata

Nico González ensaya un centro ante la presión de Bastoni durante un Fiorentina - Inter

Nico González ensaya un centro ante la presión de Bastoni durante un Fiorentina - Inter / EFE

X. Serrano

El Inter remontó en el Artemio Franchi como un campeón y duerme, de forma provisional, en lo alto de la Serie A. Tras ser barrido en la media hora inicial, cuando Sottil adelantó a la Fiorentina y Handanovic evitó la goleada, los 'nerazzurri' voltearon el marcador en dos rápidos zarpazos tras el descanso. Goles de Darmian y Dzeko. No respondió el cuadro 'viola', con uno menos por la auto-expulsión de Nico González, y Perisic marcó el 1-3 final. Promete ilusiones el proyecto de Vincenzo Italiano, pero este martes acusó su inexperiencia.

Fiorentina - Inter

Serie A

1
3
Alineaciones
Fiorentina
Dragowski; Benassi (Odriozola, 66'), Milenkovic, Nastasic, Biraghi; Bonaventura (Kokorin, 85'), Torreira (Amrabat, 66'), Duncan (Callejón, 85'); Sottil (Sapponara, 74'), Vlahovic y Nico González.
Inter
Handanovic; Skriniar, De Vrij, Bastoni; Darmian (Dumfries, 66'), Barella (Vecino, 70'), Brozovic, Çalhanoglu (Gagliardini, 83'), Perisic; Dzeko (Alexis Sánchez, 70') y Lautaro Martínez (Dimarco, 83').

Simone Inzaghi alteró el once que el sábado endosó un 'set' al Bolonia: Darmian y Perisic entraron en los carriles por Dumfries y Dimarco, mientras que Dzeko reemplazó en ataque a Correa. Lesionado, el argentino, al igual que Arturo Vidal. No así Lautaro Martínez, que se veía las caras con otro de los grandes delanteros emergentes del 'calcio', Dusan Vlahovic. Ambos llegaban a la cita con tres goles.

Un huracán 'viola'

El cara a cara, sin embargo, quedó aplazado por un tramo inicial de torrencial dominio 'viola'. La Fiore funcionó como una máquina implacable. Agresiva en la presión sobre la construcción interista, con Torreira pegado a Brozovic como un sello. Y con el balón, un equipo vertical y punzante. Vertiginoso al espacio, pero con recursos también en el juego estático. Lo sorprendente, en definitiva, fue rebasar la media hora con solo 1-0 en el luminoso.

El tanto llegó en un cambio de orientación hacia el extremo izquierdo. Nico González ganó el salto a Skriniar, mucho más corpulento, y profundizó hasta la línea de fondo. Vlahovic barrió la defensa hacia el primer poste y en el segundo Sottil solo tuvo que presentar la bota para empujar el balón al fondo de la red.

Si el Inter evitó la sangría fue gracias a Handanovic. El arquero barrió una pelota de los pies de Nico González, salvó a mano cambiada un remate de Vlahovic dentro del área y se estiró para repeler un latigazo lejano de Biraghi. No dudaba la Fiore en tirar desde lejos. También lo probó Duncan, que rozó el larguero. Mientras, Vlahovic ganaba todos los duelos a la temerosa zaga 'nerazzurra', habilitando la llegada de la segunda línea y la ofensiva por las bandas, con Sottil y Nico González como puñales.

Remontada 'nerazzurra'

Todo esto, antes de la media hora. Lo dicho, el 1-0 era un milagro. La reacción interista se insinuó en el tramo final del primer tiempo, más equilibrado. Çalhanoglu exigió el vuelo de Dragowski en un tiro de falta directa y el colegiado invalidó el empate por fuera de juego. Sin embargo, la remontada llegaría tras el descanso en un inicio alocado. La Fiore salió sin reservas a por la sentencia y descuidó su espalda de forma fatal.

El Inter empató en un rápido contraataque. Dzeko habilitó la entrada de Barella, que cedió centro del área a Darmian. El tiro, raso y seco, fue imparable. El golpe zarandeó a la Fiore, que sin comerlo ni beberlo se encontró en la lona. Acto seguido, Dzeko culminó la remontada al cabecear un saque de esquina. Y pudo sentenciar Lautaro, tras una carrera del incansable Barella, pero disparó al aire.

Víctima del cansancio y el desaliento, la Fiorentina fue incapaz de responder ante un Inter muy bien plantado en campo propio. Tal era la frustración que Nico González se hizo expulsar de forma absurda, con una doble amarilla por protestar al árbitro. Con uno menos, el equipo de Italiano se entregó por completo y Perisic firmó al contraataque el 1-3 definitivo. El Inter sigue pisando fuerte y duerme líder, con un punto y un partido más que el Nápoles.