SERIE A
Cruel retirada para Pepe Reina: ¡Expulsado el día de su despedida!
El guardameta español, que anunció su adiós al fútbol profesional el pasado lunes, puso punto final a su carrera con una roja directa ante el Inter
El día que ponía fin a una dilatada trayectoria de más de 25 años. El día que colgaba los guantes. El día que se despedía del fútbol profesional en un Como que le acogió como uno más de la familia, Pepe Reina terminó expulsado ante el Inter y marchándose prácticamente entre lágrimas.
En los micrófonos de Movistar+, el portero campeón del mundo y de Europa comunicó el pasado lunes su decisión de retirarse: "Ahora se acaba la que ha sido una carrera muy bonita, una vida muy completa. Creo que ha llegado el momento y me apetece cerrarlo aquí y seguir ligado al fútbol. Eso corre por mis venas y va a ser muy difícil quitármelo. Estoy con la ilusión de empezar proyectos nuevos".
Con el objetivo ya cumplido en el Como, Cesc Fàbregas iba a darle a su amigo Pepe Reina la despedida que merecía. Iba a ser titular en el último partido de la temporada, que podría haber sido decisivo en la lucha por el Scudetto, con el Inter visitando el Stadio Giuseppe Sinigaglia.
Todo se torció
Sin embargo, un ligerísimo contacto fuera del área iba a suponer la expulsión de Pepe Reina y su cruel despedida del fútbol profesional. La acción se produjo instantes antes del descanso, cuando Taremi iba a recibir un balón al espacio.
Pepe Reina, muy atento, salió con el objetivo de despejar el esférico para evitar un mano a mano del delantero iraní del Inter. No obstante, Taremi logró tocar el balón 'in extremis' y la bota del guardameta español rozó el pie del ariete interista.
No consideró el colegiado que fuera falta en primera instancia, pero intervino el VAR para llamarle a revisar la jugada. El árbitro internacional Davide Massa decidió expulsar con roja directa al portero del Como, al considerar que evitaba una ocasión manifiesta de gol como último hombre.
Amargo último capítulo de Pepe Reina, que dice adiós al fútbol profesional prácticamente entre lágrimas y con una mezcla de resignación e incredulidad por su expulsión. El abrazo de Cesc Fàbregas y la ovación del público sirvieron para endulzar una amarga despedida.
