‘Agitazione’ técnica en la Serie A

La llegada de Luciano Spalletti a Nápoles es el último golpe de un frenético intercambio de cromos

De los diez primeros clasificados, solo el Milan y la Atalanta repetirán entrenador el próximo curso

Luciano Spalletti, durante su etapa como entrenador del Inter

Luciano Spalletti, durante su etapa como entrenador del Inter / AFP

X. Serrano

El mercado en Italia está que arde. Puede que los clubes hayan sido golpeados por la pandemia y los fichajes estelares se antojen más improbables que nunca, pero el frenético intercambio de cromos se ha trasladado a los banquillos. El último en mover ficha ha sido el Nápoles.

El conjunto partenopeo anunció este sábado la contratación de Luciano Spalletti hasta 2023, con un sueldo que según la prensa italiana rondará los tres millones de euros. El técnico toscano, que se encontraba sin equipo tras ser cesado del Inter en 2019, aterrizó en la falda del Vesubio pocos días después de que Gennaro Gattuso, una vez finalizado su contrato con el Nápoles, firmara como nuevo entrenador de la Fiorentina.

Agitación en el campeón

Pero el baile de nombres continúa y afecta por igual a los más exitosos equipos del ‘calcio’. El mejor ejemplo es el Inter. El vigente campeón, muy mermado económicamente, hizo oficial hace tres días el adiós de Antonio Conte. El club imponía un recorte cercano a los 80 millones en ventas, el técnico de Lecce no estaba dispuesto a perder poder competitivo y al final ambas partes llegaron a una entente más o menos cordial.

La marcha de Conte alteró la negociación de Simone Inzaghi para renovar con la Lazio. El acuerdo parecía próximo, pero el Inter entró en escena con una oferta de cuatro millones (casi el doble de lo que ofrecía la Lazio) y la prensa italiana asegura al unísono que será ‘nerazzurro’ de forma inminente. 22 años llevaba Inzaghi en el club, que ahora busca entrenador. Y los rumores se disparan. Desde Maurizio Sarri, sin equipo desde su cese de la Juve en 2020, a Sinisa Mihajlovic, técnico del Bolonia, pasando por Vincenzo Italiano, del Spezia, o Walter Mazzarri.

El otro equipo capitalino, la Roma, ya anunció a principios de mayo la llegada de José Mourinho para reemplazar a Paulo Fonseca. Y sin llamar demasiado la atención de los medios, el ‘Toro’ anunció el viernes el fichaje de Ivan Juric, procedente del Verona y alumno aventajado de Gasperini.

La Juve desanda camino

Aunque ningún culebrón ha tenido más repercusión mediática que el de la Juventus. La crónica de un despido anunciado, pues el novel Andrea Pirlo ha sido cuestionado durante todo el año a medida que acumulaba decepciones. Ni siquiera el arreón final, con el título copero y el billete a la Champions, le valió para salvar el cuello.

Al final las habladurías se convirtieron en realidad con el regreso de Massimiliano Allegri, que firmó hasta 2025 por nueve millones al año, al banquillo que había abandonado dos años antes. Pirlo, por cierto, ha sido sondeado por el Sassuolo para reemplazar a Roberto De Zerbi, recién fichado por el Shakhtar Donetsk, en el banquillo ‘neroverdi’.

Estabilidad, 'rara avis'

En medio de esta agitación, ganan los que permanecen. En Italia, la estabilidad es un bien tan preciado como escaso, pero no inalcanzable. Vale el caso de la Atalanta, tercera clasificada, con Gian Piero Gasperini. O del segundo, un Milan que según la prensa local planea premiar a Stefano Pioli, tras acceder a la Champions después de siete años, con una extensión hasta 2024.