Cómo proteger nuestros pies de los excesos navideños

Cómo proteger nuestros pies de los excesos navideños

Cómo proteger nuestros pies de los excesos navideños

Si hay una palabra que resuma estas fechas navideñas, es excesos.

Comidas, cenas, dulces, bebidas… Prácticamente todos abusamos de ellas y, como consecuencia, sufre nuestro sistema digestivo, el cardiaco e incluso, nuestros pies.

Porque según el Ilustre Colegio de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) las Navidades son unas fiestas que pueden pasar factura a la salud de nuestros pies.

El frío y los excesos en la ingesta de comida y bebidas alcohólicas son los principales factores que pueden afectar a los miembros inferiores.

Carnes rojas, mariscos y alcohol

En concreto, los podólogos han advertido de que en el caso de las personas con ácido úrico elevado el consumo de carnes rojas, mariscos y dulces, pueden predisponerles a padecer ataques de gota, una forma de artritis que provoca un dolor agudo en la articulación metatarsofalángica del dedo gordo del pie.

En lo que al abuso del alcohol se refiere, las afecciones más comunes son la hinchazón de los pies.

Y es que las bebidas espirituosas provocan retención de líquidos, debilidad muscular debido a que afecta a las fibras nerviosas o manchas rojizas en los pies, entre otros síntomas.

Estas molestias denotan que el hígado puede haberse visto afectado y no elimina bien las toxinas, no absorbe los nutrientes y no metaboliza las grasas.

Además, utilizar un calzado que no proteja adecuadamente los pies del frío puede causar dermatitis, eccemas o dolorosos sabañones.

Recomendaciones de los podólogos

Para evitar estos problemas derivados del frío, que dificulta una óptima circulación sanguínea, y de los excesos habituales en Navidad, desde el ICOPCV facilitan algunas pautas para proteger nuestros pies.

  • Es importante llevar una dieta equilibrada. Durante estos días puede ser más complicado, pero se puede compensar llevando una dieta liviana los días que no haya celebraciones.
  • Utilizar un calzado que mantenga la temperatura del pie, como, por ejemplo, los botines.
  • Si nos vamos a poner elegantes para las cenas y comidas de Navidad, lo mejor es escoger un tacón que de estabilidad al caminar y que no sobrepase los 4 cm.
  • Es época de regalos. Si has pensado tener un detalle con alguien regalándole unos zapatos, compra siempre calzado de materiales naturales y flexibles que se adapten al pie y permitan su movimiento natural (con el frío la piel está más sensible y es más susceptible de sufrir heridas).
  • Parece que van a ser unas fiestas pasadas por agua. Así que es importante comprobar que la suela de nuestros zapatos sea antideslizante. En los meses de frío es frecuente que, por la humedad o la lluvia, el suelo esté húmedo y ayudará a evitar resbalones y a caminar con seguridad.

Por último, desde el ICOPCV insisten en que una dieta equilibrada y moderar el consumo de alcohol es esencial para una buena salud en general y de los pies en particular.

Además, en el momento en que se detecte cualquier anomalía en los pies es fundamental acudir a un profesional de la Podología para que puedan analizarse las causas y aplicar el tratamiento específico más adecuado con el objetivo de evitar consecuencias mayores que pueden afectar a la movilidad y estabilidad de la persona.