El Leipzig supera al Stuttgart y aprieta las tuercas al Bayern

Los 'toros rojos' tiraron de oficio para llevarse la victoria en un partido que se decidió por dos pinceladas de Szoboszlai

El cuadro bávaro está obligado a ganar mañana para no seguir cediendo terreno en la lucha por el campeonato

Szoboszlai marcó los dos goles del Leipzig en la victoria sobre el Stuttgart

Szoboszlai marcó los dos goles del Leipzig en la victoria sobre el Stuttgart / @RBLeipzig

Alberto Teruel

El Bayern comienza a sentir el aliento del Leipzig en la nuca. Los 'toros' rojos, invictos en el campeonato doméstico desde el ya lejano 17 de septiembre, superaron al Stuttgart gracias a dos zarpazos de Szoboszlai para situarse momentáneamente a un punto del cuadro bávaro. No fue el partido más brillante de los pupilos de Marco Rose, que tuvieron que tirar de oficio para obtener un partido que se fue equilibrando con el paso de los minutos.

Leipzig-Stuttgart 27/01/23

Bundesliga

2
1
Alineaciones
RB Leipzig
Blaswich; Henrichs (Klostermann, 80'), Orban, Gvardiol, Raum (Halstenberg, 80'); Szoboszlai, Haidara, Schlager, Olmo (Forsberg, 46'); Werner (Poulsen, 84'), Silva (Laimer, 68').
Stuttgart
Müller; Stenzel, Anton, Ito, Vagnoman; Endo, Karazor, Nartey (Egloff, 86'), Kastanaras (Perea, 46'), Pfeiffer (Kuol, 86'), Führich (Coulibaly, 80')

A pesar de formar con un esquema plagado de variantes ofensivas, el Leipzig tuvo que resignarse a aguantar las acometidas del Stuttgart. Pero una vez amainó la tormenta, el cuadro de la factoría Red Bull no perdonó y se adelantó mediante una falta muy protestada por el infractor, Wataru Endo.

Las responsabilidades del tanto inaugural se repartieron entre Szoboszlai y Müller. En mayor parte fue gracias al atrevimiento del centrocampista húngaro, que tuvo más fe que nadie y probó fortuna desde una distancia prohibitiva. La lejanía de esta falta condicionó al guardameta alemán, que pecó de exceso de confianza y apenas pobló su barrera. El resultado, un potente disparo con bote en el suelo incluido que dejó vendido a Müller.

El Stuttgart salió decidido tras el paso por vestuarios, pero su empeño apenas tardó cuatro minutos en ser sofocado. El verdugo volvió a ser Szoboszlai, que aprovechó un rechace en la frontal del área para acomodarse el esférico a una altura perfecta y batir a Müller mediante un disparo de volea.

Los 'toros rojos' sacaron pecho y se volcaron en busca del contrario, llegando a concentrar a ocho jugadores en sus internadas. Cuando más desequilibrada parecía estar la balanza, Gvardiol apareció para ejercer como contrapeso. El defensa croata sacó a pasear la mano en el área y Führich se encargó de reducir distancias desde los once metros. Poco faltó para que Blaswich lo repeliese, pero el disparo llevaba la potencia suficiente como para entrar a pesar de golpear en la mano del portero.