Oscar de la Hoya reta a McGregor: "Solo me dura dos asaltos..."

El campeón del mundo de boxeo, Oscar De La Hoya, dijo este martes que estaría dispuesto a subirse de nuevo al ring para enfrentarse a la gran figuras de las artes marciales mixtas, Conor McGregor.  

El púgil mexicano, que en la actualidad tiene 44 años y se ha convertido en promotor, no se ha calzado unos guantes desde que fue derrotado por el filipino Manny Pacquiao en 2008. De la Hoya, sin embargo, desveló que se está "entrenando en secreto"  y confía en derrotar al campeón de UFC McGregor.

"Todo el mundo sabe que soy competitivo", dijo el azteca al programa de radio digital 'Golden Boy Radio with Tattoo and the Crew'. "Todavía recuerdo qué es el boxeo. No he olvidado cómo se pega. He estado entrenando en secreto. Estoy más rápido que nunca y soy más fuerte que antes. Sé que puedo derribar a Conor McGregor en dos asaltos. Volveré para esa pelea. Dos asaltos. Solo una (pelea) más. Lo estoy llamando cada día a ver si acepta. Dos asaltos, eso es todo lo que necesito. Eso es todo lo que voy a decir por ahora ".

De La Hoya ya barajó la posibilidad de regresar al cuadrilatero en junio de 2015 pero lo desestimó una semana después.

De la Hoya, que fue medallista de oro olímpico de Barcelona 1992 y diez veces campeón del mundo, fue uno de los que se mostró más crítico con la incursión que hizo McGregor en el mundo del boxeo a principios de este año cuando combatió (y perdió) con Floyd Mayweather.En su opinión, solo fue una pelea sustantada por el dinero.

McGregor, de 29 años, fue noqueado en aquella ocasión en el décimo asalto de esa pelea, que De La Hoya tachó de "circo" y de "farsa".

De La Hoya dijo que solo consideraría pelear contra McGregor si se atuviese a las reglas del boxeo y no a las de MMA. "Vamos a aclararlo: en una jaula, él enloquecería y probablemente me destruiría, pero en un combate de boxeo, yo lo aplastaría".

"He estado ejercitándome durante los últimos cinco meses. Ahora estoy muy confiado. No sé que me ocurre, pero les diré que nunca me he sentido mejor".