¿Por qué Xavi ha dado el visto bueno al fichaje de Raphinha?

Raphinha tiene el perfil que agrada al técnico egarense: un extremo explosivo, profundo, polivalente y con gol

El brasileño vendría en lugar de Dembélé con rol de titular y Adama seguirá si se cumplen determinadas circunstancias

El Barça mueve ficha y presenta su primera oferta por Raphinha

El Barça mueve ficha y presenta su primera oferta por Raphinha / Marta Fernández

Joaquim Piera

Joaquim Piera

El Barcelona ha decidido apostar por Raphinha, porque es un fichaje de calidad contrastada que crea consenso entre todos los estamentos deportivos del club, lo que incluye, por supuesto, Xavi Hernández. Su incorporación es estratégica, ya que, según evolucione el mercado, puede acabar siendo la principal inversión para reforzar el ataque blaugrana. De momento, ya se ha ofrecido al Leeds 35 millones de euros. En la actual conjetura de reconstrucción deportiva y económica, no hay músculo financiero para ser desperdiciado en fichajes fallidos.

El camino lo marca el exitoso mercado invernal. Y Raphinha responde al prototipo de jugador que el Barça quiere seguir buscando. Xavi Hernández ha dado el consentimiento a la incorporación del internacional canarinho del Leeds United que, sobre el papel, viene a desempeñar el rol de Ousamane Dembélé, que termina contrato el 30 de junio y ha despreciado todas y cada una de las ofertas presentadas por el Barça.

El delantero gaucho, que es zurdo, actuaría, en principio, por la derecha, como lo hace en el Leeds y en la Seleçao. Sería el teórico titular en esta posición y no ocuparía ficha de extracomunitario porque tiene pasaporte italiano.

Y Adama Traoré seguiría teniendo minutos de calidad si, al final se acaba confirmándose su continuidad, ya que vino en enero cedido hasta el 30 de junio. El camino más plausible para ello es que haya un trueque con Trincao, propiedad del Barcelona y que está jugando cedido en el Wolverhampton.

UN JUGADOR PARA UN BARÇA EXUBERANTE

Raphinha responde al prototipo que le gusta a Xavi. Es un futbolista explosivo, que rompe en el uno contra uno con velocidad y que cuenta con los recursos técnicos adecuados para marcar diferencias en espacios reducidos. Es un extremo puro, disciplinado, que da amplitud jugando absolutamente abierto y con mucha consciencia táctica colectiva, en este aspecto ha evolucionado mucho en el tiempo que ha coincidido con Marcelo Bielsa en el Leeds.

Aporta desequilibrio, ritmo frenético, trabajo defensivo (es el primero en empezar la presión alta en el Leeds y en la Canarinha de Tite) y polivalencia táctica, porque puede jugar indistintamente por los dos lados del ataque, una posibilidad mu apreciada por los técnicos.

Jugando por la derecha, busca con insistencia las diagonales ya sea para finalizar de larga distancia con su potente zurda u optar por la asociación. Cuando está rodeado de calidad, sus prestaciones aumentan. En este sentido cabe destacar la sociedad que ha creado con Neymar Jr. en la Canarinha, ya que los dos hablan el mismo idioma futbolístico.

Esta temporada ya acumula 12 tantos: son 9 en la Premier con el Leeds y 3 con Brasil, a lo que hay que sumar 5 asistencias. Su progresión en todos los aspectos es evidente, crece a pasos agigantados, llegó a la Seleçao y, en un tiempo récord, se hizo con la titularidad en la punta derecha.

Su mentalidad ganadora es inquebrantable. Juega arriesgando porque sabe que su misión es romper líneas de presión y no se arruga nunca, como quedó claro por ejemplo, en el brutal codazo que le propinó Otamendi en la boca en el último Argentina - Brasil.