Xavi agita la pizarra y medita volver al 3-4-3

La nueva etapa a la que se refirió Xavi en la rueda de prensa posterior al partido del Allianz Arena de Múnich empieza esta tarde en Pamplona. El egarense habló de “exigirnos muchísimo más, somos el Barça” y de “punto de inflexión para ir para arriba, para trabajar todos juntos, para cambiar la dinámica”. El primer paso quiere darlo a costa de Osasuna y medita dibujar un 3-4-3 en la pizarra, un sistema que le dio un buen resultado en Villarreal (1-3), aunque reconociera al final del encuentro que fue su peor partido al frente del equipo. 

Xavi apostó en los dos últimos partidos, Betis y Bayern Múnich, por una defensa de cuatro —con matices— y en ambos casos el resultado fue negativo: derrota ante el equipo andaluz en el Camp Nou (0-1), la primera de su etapa, y derrota en Alemania, que derivó en eliminación de la Champions League.

Forzado

El entrenador del Barça regresaría al 3-4-3 para minimizar la baja por lesión de Jordi Alba y, también, por el bajo rendimiento que le han ofrecido algunos jugadores por banda derecha. Así, sin carrileros, el trío de centrales elegido podría ser el integrado por Araujo, Piqué y Lenglet, con quien el técnico mantuvo un aparte. El canterano Eric, que no se alineó contra el Betis ni contra el Bayern Múnich, seguiría en el banquillo, al igual que Umtiti, todavía inédito en la presente temporada.

Por delante de la zaga, el capitán Busquets como referencia en la zona ancha, escudado por De Jong y Nico, con Gavi con más libertad por ser un jugador que cubre mucho espacio de terreno y se aplica sin reservas en la presión, como demostró en el último encuentro.

En vanguardia, las plazas serían para Abde evolucionando por la banda derecha, un jugador del que el técnico catalán espera mucho por su capacidad de desequilibrio en el uno contra uno y que ha sido titular en los dos últimos partidos de Liga: Villarreal y Betis, Luuk de Jong como ariete y Dembélé entrando por banda izquierda.

Revulsivos

Además de los habituales, léase el brasileño Coutinho, que no consigue recuperar su mejor nivel y Demir, muy intermitente y cada vez con menos minutos, Xavi se guardará en el banquillo una carta desconocida hasta ahora en el primer equipo: Ferran Jutglà, delantero del filial que puede jugar en punta o en banda. 

La entrada de Jutglà ha estado propiciada por la imposibilidad de poder contar con el sancionado Ilias, expulsado el pasado fin de semana contra el Villarreal B por “realizar una entrada a un adversario con uso de fuerza excesiva derribándolo en la disputa del balón”, según el acta arbitral. El delantero, que debutó como titular contra el Espanyol (1-0) en el estreno de Xavi, no pudo jugar contra el Benfica por sanción y se quedó en el banquillo ante el Villarreal y Bayern. No fue convocado ante el Betis.