Valverde no quiere a Malcom

Ernesto Valverde no cuenta con Malcom para esta próxima temporada. Y la dirección deportiva del Barcelona ya trabaja para intentar buscar un club comprador por un futbolista que no ha gozado, ni gozará, de la confianza plena de su entrenador.

No hay lugar para Malcom en la planificación del Barcelona 2020. Como ya apuntó SPORT, a finales de mayo, el ex del Girondins no veía nada clara su continuidad y estaba sospesando abandonar el Camp Nou, ante las ofertas de la Premier League, que le garantizan recuperar los minutos que ha perdido en su primera temporada en el conjunto blaugrana. Y este no es un detalle menor para un futbolista de 22 años, que es muy consciente que tiene la confianza de su seleccionador, Tite, que lo conoce de su etapa en el Corinthians y que ya lo ha convocado para la Seleçao esta última campaña.

Con las posibles llegadas de Neymar Jr. y Antonie Griezmann, que podrían concretarse en cuestión de semanas, Malcom se vería relegado a un papel absolutamente residual. Por este motivo, Valverde ha ido de cara y, según ha podido confirmar SPORT, ha pedido una solución en forma de traspaso (o cesión) para el extremo paulista.

La posición del entrenador coincide con los intereses del club. Aunque Malcom siempre fue una apuesta a medio plazo de la secretaría técnica, iniciada por Robert Fernández y ejecutada por Pep Segura, las oportunidades de mercado que ahora han surgido (léase las opciones de poder fichar a Neymar y Griezmann en esta ventana) obligan al club a buscar recursos para tener músculo financiero y, de esta manera, afrontar incorporaciones de peso. Es necesario vender para evitar el riesgo de colapsar la masa salarial.

Ingresar 50 millones con su traspaso

Un año atrás, el Barça, en un fichaje relámpago, acabó pagando por el brasileño 41 millones de euros, de los cuales ya se han amortizado una quinta parte. El ex del Girondins ha despertado el interés de varios clubes de la Premier, que en los últimos meses se han interesado por su situación. 

No es descabellado pensar que es posible que el Barcelona reciba ofertas que se acerquen a los 50 millones de euros, por lo que su salida, contablemente, daría beneficios. Sería una operación más que positiva, incluso desde el punto de vista deportivo, por un futbolista que ha jugado intermitentemente y, que, en un año vestido de blaugrana, no habrá tenido tiempo suficiente para que deje saudades. 

Con un escenario en que el técnico que no cuenta con el jugador, en que hay la predisposición del propio protagonista y del Barcelona en buscar un club comprador, su traspaso (o cesión con opción obligatoria de compra) es de las más ciertas en un verano, en que vender activos es tan prioritario como reforzar una plantilla, que ha ganado la Liga con rotundidad, pero que sigue haciendo corto en la Champions. 

Liberará una ficha de extracomunitario

La más que probable marcha de Malcom conllevará que el Barcelona tenga a su disposición una plaza libre para un posible refuerzo extracomunitario. Las otras dos seguirán ocupadas por Arthur Melo, que está firmando una Copa América espectacular con la Seleçao, y por Arturo Vidal, a quien el fútbol chino lo está tentando con una mareante oferta, pero, que a día de hoy sigue pensando que su primera opción es seguir en Barcelona, donde ha encajado en el vestuario y en la filosofía de juego que propone Ernesto Valverde.