Valverde: debut en el banquillo con doblete

La primera temporada de Ernesto Valverde al frente del FC Barcelona acabará con un notable alto. Con la Copa del Rey en el bolsillo y la Liga al caer, bajar el telón con dos títulos (doblete) de cuatro posibles (más la Supercopa de Catalunya), no puede considerarse un fracaso por muy dolorosa que fuera la eliminación de la Champions League. El equipo azulgrana, con el cambio de timonel, ha respondido, ha dado la cara y ha hecho feliz a la afición con dos títulos.

Es cierto que el juego no ha brillado como en pasadas temporadas, pero hay que convenir que es imposible jugar bonito y golear en cada partido en campañas maratonianas con más de 60 encuentros. Y eso sin contabilizar los choques que los internacionales acumulan con sus respectivas selecciones.

También es verdad que Valverde no ha empezado su etapa con el triplete, como lo hicieron Guardiola y Luis Enrique, pero arrancar con un doblete (el Barça solo ha ganado ocho a lo largo de la historia) es muy meritorio. Además, a nadie se le escapa que la Liga 2017-18 puede ser histórica (como la de los 100 puntos de Tito Vilanova) si el equipo es capaz de bajar el telón con ninguna derrota.

Igualmente, el Barça 2017-18 ha ido de menos a más. Ha crecido y eso es relevante. Empezó dejando muy malas sensaciones después de ser superado netamente por el Real Madrid en la Supercopa de España pero, a partir de ahí, entró en una nueva dinámica que lo llevó, por ejemplo, a encadenar una racha de 29 partidos sin perder, secuencia en la que abonó el terreno para el asalto a la Liga y a la Copa.

Hasta el momento, de los 54 partidos disputados por el equipo de Valverde, 38 finalizaron con victoria (70,3 %) y solo cuatro con derrota (7,4 %). Unos números que no lograron los equipos de los técnicos que precedieron al timonel extremeño. Además, el técnico azulgrana tiene un promedio de 2,31 goles por partido y solo encaja 0,59 por duelo.

Resumen del Barça 2017-18 de Valverde: