Valverde, en busca de la solidez perdida

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

El problema ha sido detectado y ese es el primer paso para encontrar una solución. Sobre el papel parece sencillo porque lo único que debe hacer el Barça para evitar la sangría de ocasiones concedidas y goles encajados es no conceder ocasiones para evitar encajar goles. Pero detectar el problema, por otro lado una evidencia, es el paso más sencillo de la cadena. Lo complicado es encontrar la causa que provoca el problema. Ernesto Valverde, como técnico, es el encargado de esa ardua labor y en eso está, tal y como reconocía ayer en la rueda de prensa previa al enfrentamiento ante el Tottenham.

A grandes rasgos, la solución pasa por dar mayor equilibrio entre el ataque y la defensa, reagrupar al equipo y hacerlo más sólido y consistente. Para ello, y aceptando que el 4-3-3 usado esta temporada con mucha mayor frecuencia que la pasada temporada ha provocado esos desajustes tan incómodos, la lógica invita a pensar que el técnico regresará al 4-4-2 que la pasada campaña le hizo ganar, por lo menos esa fue la sensación, LaLiga con la gorra. La diferencia respecto al ejercicio anterior es que no está Paulinho. Y esa es la gran incógnita esta noche en Wembley si Valverde apuesta, como parece, por un centro del campo más poblado: ¿quién hará de Paulinho?

Los arturos, presentes

Tienen un perfil absolutamente opuesto: Arturo Vidal es un nervio que aparece por todos lados basándose en su potente físico. El chileno destaca por su sacrificio defensivo sin balón, todo lo contrario que Arthur Melo, cuya mayor virtud es esconder la pelota al rival a través de la posesión. Vidal sería el sustituto más parecido a Paulinho, mientras que el ex de Gremio aportaría matices diferentes al juego en la medular, en la que parece muy poco probable que no aparezcan Sergio Busquets, Rakitic y Coutinho.

La defensa, sin sorpresas

Ter Stegen cerrará desde la portería una línea defensiva formada por Semedo (Sergi Roberto está lesionado), Piqué (no tiene recambio), Lenglet (Umtiti está lesionado) y Jordi Alba (no tiene recambio). Valverde se ha llevado a Vermaelen y Miranda, del Barça B, cuya presencia está prevista solo en caso de emergencia. Como Denis Suárez y Rafinha en el centro del campo. Arriba Messi y Suárez son titulares indicutibles ya sea en un 4-4-2 en el que monopolizarían la línea ofensiva, como también en el caso de que el técnico  acabe insistiendo en Dembélé como elemento desequilibrante y acompañante de ambos. El equipo necesita equilibrio y Valverde está en ello.