El Valladolid llega al Camp Nou repleto de bajas

El entrenador del Real Valladolid, Sergio González, ha avanzado este sábado, en rueda de prensa telemática, que tendrá numerosas bajas para el partido que les enfrentará, este lunes, al Barcelona en el Camp Nou. "Ha sido una semana de mierda", ha resumido el técnico.

Así, a la baja de Orellana, que no podrá jugar por acumulación de tarjetas, se añaden la de los jugadores que dieron positivo por Covid -Roberto Jiménez, Joaquín Fernández, Míchel Herrero, Luis Pérez y Kike Pérez-, además de la más que posible de Weissman, que llegó de su participación con Israel con un fuerte golpe en un pie.

Además, tanto El Yamiq como Fede San Emeterio han tenido que retirarse de la sesión de trabajo de este sábado con molestias en el aductor, mientras que Kiko Olivas aun tiene por delante otras dos semanas de recuperación, y se mantienen las ausencias de Jota y Raúl Carnero.

Serían doce, en total, los jugadores que no podrán viajar a la Ciudad Condal, lo que supone un importante varapalo para un Real Valladolid que aspira, a pesar de ello, a "dar la sorpresa" ante un Barça que pasa por su mejor momento de la temporada, y que acumula una media de cuatro goles por partido en su feudo.

"Se supone que esta semana tenía que servirnos para recargar pilas, ahora que estábamos siendo estables, y ha sido al revés, debido a las bajas por el Covid, y a las que se han ido sumando las de Weissman, El Yamiq y Fede", ha detallado Sergio González.

No todo han sido malas noticias, ya que Marcos André y Pablo Hervías ya están totalmente recuperados de sus lesiones y "si bien no están para ser titulares, sí podrían contar con algún minuto de juego", ha advertido.

Según ha recordado el técnico catalán, el conjunto blanquivioleta "es un equipo con ilusión, rebelde y de supervivencia, que ha sido capaz de saltar las numerosas piedras que han ido surgiendo por el camino, algunas de las cuales se han pasado por alto, porque los jugadores tienen fuerza mental y tiran hacia delante".

"Es una situación muy complicada, con muchas ausencias, pero el once que saldrá, estoy convencido de que hará buen partido. Sabemos de las facultades del rival, pero vamos con ilusión, con alegría y con ganas de sacar algo positivo. Debemos estar convencidos del plan del partido para, por qué no, dar la sorpresa", ha matizado.

Una vez más, deberá cambiar el bloque defensivo, lo que supondrá "una prueba de fuego más" para el equipo, pero el objetivo ha de ser "salir al césped, competir, no perder las buenas sensaciones y evitar las distracciones a pesar de tanto obstáculo", ha añadido.

En su opinión "hay que estar atentos para que el Barça no busque pases por dentro, a sus diagonales, a sus puntas referenciales que pueden caer en banda y al medio punta que puede aparecer", ha analizado, al tiempo que ha reconocido que se han "preparado" para afrontar un 4-2-3-1, un 4-3-3 o una posible línea de cinco en defensa del rival.

Eibar y Cádiz pudieron puntuar en el Campo Nou y, al respecto, Sergio ha comentado que "todos los equipos grandes pasan por situaciones en las que no se encuentran cómodos y el Barcelona ya ha consumido dos balas", de ahí que confíe en que "la tercera" la tenga el Valladolid el lunes y pueda sacar algo positivo del estadio blaugrana.