Así se ultima el traspaso de Vitor Roque al Palmeiras

Hay (mucho) optimismo en el Palmeiras, que está convencido de que, en las próximas horas, podrá anunciar a Vitor Roque como su refuerzo estrella para este 2025.

Vitor Roque al Palmeiras: límite 48 horas

La operación, tal como ha ido explicando de forma detallada SPORT durante estas últimas semanas, avanza a pesar de la complejidad de tener que poner de acuerdo a tres clubes, porque Tigrinho, con contrato con el Barça hasta mediados de 2031, está cedido al Real Betis hasta el 30 de junio. Y, por si fuera poco, todo se está negociando con el mercado de fichajes cerrado en LaLiga, pero abierto en Brasil, donde permanecerá así hasta el próximo viernes.

Las bases del acuerdo están puestas. Quien lo ha diseñado todo es André Cury, el agente del jugador con pasado blaugrana, porque fue el hombre de la secretaría técnica en Sudamérica durante más de una década. El representante, que está en Sao Paulo después de visitar Barcelona y Sevilla las últimas semanas, es el mentor del traspaso y está intentando conciliar los intereses de todas las partes involucradas.

Vitor Roque, que el viernes cumplirá 20 años, ya se ha puesto de acuerdo con el Verdao, que lo convertirá en su piedra angular y en el futbolista mejor pagado de la plantilla.

Los paulistas tienen una fe ciega en su potencial, a pesar de que su aventura en el fútbol español no está saliendo como se había planeado. Su pasado en el Athlético Paranaense lo avala. El delantero sabe que será arropado por todos los estamentos palmeirenses (algo que no le sucedió en Barcelona) en un proyecto muy ambicioso y sólido, que tiene como objetivo prolongar una de las etapas más brillantes y vencedoras de la historia de la entidad.

El Barça, que acabará acatando la voluntad del futbolista de regresar a su país, ha alcanzado una entente verbal con el Verdao que satisface sus necesidades de no contabilizar pérdidas con Tigrinho, fichado por 30 millones de euros del Furacao (más 31 en variables que no se han cumplido ninguno de ellos).

Si todo llega a buen puerto, Vitor Roque será traspasado por 25 millones de euros, por el 80% de los derechos económicos. Es el mismo acuerdo que el Barça cerró a inicios de temporada con el Betis, que tiene una opción de compra, en estos términos, al final de esta campaña.

Faltan flecos sobre cómo el Palmeiras realizará el pago del traspaso, que el Barça ha pedido que se realice íntegramente antes del 30 de junio para que se compute en el actual ejercicio.

En principio, el Verdao tiene liquidez porque está capitalizado. Es, junto al Flamengo, uno de los dos clubes sudamericanos más solventes. En enero, vendió a Vitor Reis al Manchester City por 37 millones de euros (es la mayor venta de un central desde Brasil hacia Europa). Y, este mes, estaba dispuesto a invertir parte de este montante en comprar al internacional Andreas Pereira, del Fulham, por 20 millones de euros (más otros cinco en variables), pero el centrocampista prefirió, a última hora, permanecer en Inglaterra.

Convencer al Real Betis no está siendo tarea fácil para los paulistas, porque Manuel Pellegrini cuenta con Tigrinho, a pesar del fichaje invernal del colombiano Chucho Hernández y que, en las últimas semanas, Cédric Bakambu le ha ido comiendo la tostada al brasileño.

Desde el inicio de las tratativas, el Palmeiras se mostró muy reacio a pagar cualquier tipo de compensación al Betis, porque consideraba que el beneficio del club andaluz, que paga toda la ficha del brasileño, radica en ahorrarse los últimos cuatro meses de salario del jugador y, también, la posibilidad de pagar 1,5 millones de euros al Barça en junio, porque el futbolista no está jugando el 50% de los minutos oficiales como se detalló en una de las cláusulas del contrato de cesión.

Existe la posibilidad de que los verdiblancos acaben quedándose con un porcentaje pequeño de futura venda del jugador, que el Barça o el propio Palmeiras, le acaben cediendo. En ningún caso, el Betis hará caer la operación y perjudicará los intereses blaugranas, porque los verdiblancos son conscientes que su buena sintonia con el Barça solo le reporta beneficios deportivos.

Todo acabará definiéndose en las próximas horas, porque el Palmeiras tiene prisa y no quiere esperar hasta el viernes cuando se cierre la ventana de contrataciones en Brasil para descubrir el desenlace de un fichaje que es clave y primordial para ellos.