Tres exazulgranas triunfan en el Badajoz

El CD Badajoz ha completado la primera fase de Segunda B como el equipo con más puntos (41) y menos derrotas (una) de los 102 equipos que componen esta temporada la Categoría de Bronce del fútbol español y este domingo comenzará la segunda fase a las 12.00 horas en el feudo del DUX Internacional de Madrid.

Con un colchón de seis puntos sobre el San Sebastián de los Reyes y nueve sobre el Real Madrid B, el equipo que preside el ambicioso Joaquín Parra está decidido a luchar por un ascenso a LaLiga Smartbank del que le privó el curso pasado el Barça B en el penúltimo partido (cayó en el duelo decisivo ante el Sabadell). Al menos, ya es equipo de la nueva Liga Pro que pretende impulsar la RFEF pese a que casi todo sigue siendo una incógnita.

En el segundo proyecto completo de Parra al frente del club y con Fernando Estévez en el banquillo tras la destitución de Pedro Munitis en plena pretemporada, el cuadro blanquinegro cuenta con tres exjugadores de la cantera azulgrana que están siendo clave: Sergi Maestre, Àlex Corredera y David Concha.

Los tres fueron titulares este domingo en el victorioso inicio de la segunda fase en el feudo del DUX Internacional de Madrid por 0-2 con goles del propio Corredera de penalti y de Dani Aquino, el hijo del mítico 'Toro'. De esta forma, los blanquinegros tienen ya muy cerca la clasificación matemática para las eliminatorias de ascenso.

Maestre, el 'Busi' del Badajoz

Maestre (30 años) es un pivote al estilo Busquets con dos etapas en la cantera azulgrana, pero no llegó a debutar en el filial. "Empecé de extremo izquierdo, pero en juveniles cambié al mediocentro y en dos años volví al Barça. Hay parecido físico con 'Busi' en cuanto a delgaditos, altos y morenos, pero con el balón en los pies él es un poquillo mejor ", explica riéndose.

En el Juvenil A estuvo "con Oriol Romeu, Jonathan dos Santos, Rochina, Muniesa, Montoya... Estaban los buenos y yo. Volví ilusionado al Barça después de haber estado allí en alevines. Me lesioné enseguida y cuando me recuperé era imposible hacerme un hueco. Además de Romeu y Jonathan, en mi posición estaban ‘Polaco’ e Ilie. Disfruté de ser tratado como un profesional y de no tener más preocupaciones que jugar. Después aprendí a valorarlo".

En cuanto al actual Barça, Maestre destaca que es "una montaña rusa. Cuando se pierde un partido parece que se va a acabar el club y en cuanto se ganan dos parece que son otra vez los mejores. Desde aquí lo sigo, claro. Me gusta ver los partidos con Àlex y comentar la situación. Es un año muy complicado y la vuelta de Laporta ilusiona por lo que hizo en el pasado. Creo que puede hacer otra vez un Barça campeón, pero antes vienen unos años un poco oscuros".

En el Badajoz le va de maravilla. "El club apostó muy fuerte por mí en 2019 cuando salí de Murcia. Me recibieron con los brazos abiertos, el un vestuario es muy sano y estoy muy a gusto en el club y en la ciudad. Ojalá subamos. Vinimos con esa idea de dar un paso adelante, apostamos por este sitio pudiendo haber ido a otros y las cosas van bien, pero hay que ser realistas. De 102 equipos solo suben cuatro y es complicadísimo", afirma el catalán.

El 'mago' Corredera

Àlex Corredera (25) conquistó la primera UEFA Youth League 2013-14 con Jordi Vinyals. "Estuve 11 años en el Barça, desde los ocho. Me queda un poco la espinita de no haber jugado en el Barça B, porque creo que tenía posibilidades. No contaron conmigo y me fui al Dépor B. Ese año el Barça B bajó a Segunda B, cambió la directiva y en ese mar revuelto no renové. Enseguida ves que el fútbol fuera del Barça es otra cosa. Allí estás como en una burbuja".

Con un talento enorme y autor de siete goles en este curso, el de Sant Joan de les Abadeses sería un cruce entre Pedri, Riqui Puig y Pjanic. "En el Barça jugaba de interior en el 4-3-3, pero los demás equipos juegan casi todos 4-4-2 o 4-2-3-1 y tienes que adaptarte. Empecé a jugar tirado a la derecha, pero los entrenadores que me han ido inculcando esa faceta defensiva necesaria para jugar de pivote y ahí es donde mejor me siento. Me gusta tener el balón y manejar los encuentros. Esta temporada tengo minutos más arriba y estoy aportando goles”.

Corredera admite que le gusta "llevar el 10 por lo que significa compartir dorsal con Messi" y ejerce de culé en la distancia. "Hemos crecido con el Barça y nos gusta verlo. Esta temporada parecía una cosa y está siendo otra mejor. Koeman da minutos a jugadores de la cantera y el equipo se está recomponiendo. Después Pedri está sorprendiendo a todos y Ansu Fati era un espectáculo cuando debutó. En Champions hay equipos muy hechos y es más difícil, pero si se retiene a Messi y se le rodea de dos o tres jugadores nuevos más toda la gente joven, se puede pelear por cosas importantes. Mira el recital del otro día en Anoeta ", reflexiona.

Sobre la realidad del Badajoz y sin entrar en el interés que mostró el Girona por él en verano, el medio recuerda que cuando llegó en 2019 "era un equipo casi nuevo con una apuesta económica muy fuerte del 'presi' y fue una buena temporada con un final agridulce tras caer en la segunda eliminatoria contra el Barça B. En esta temporada ha habido estabilidad y están saliendo las cosas muy bien a nivel colectivo y a nivel individual. Sabemos lo difícil que es subir, pero también es un reto enorme y queremos demostrar que somos capaces".

Concha vuelve a sonreír

24 años tiene David Concha, quien llegó al Barça B de Jordi Vinyals en el curso 2017-18 cedido por la Real Sociedad, pero se fue en invierno "por una lesión. En la primera vuelta tuve minutos, pero jugaba, volvía a estar de baja y en enero no podía más. Riqui (Puig) subía algún día a entrenar. Estaban Abel Ruiz, Jorge Cuenca, Rodri Tarín, Aleñá, Cucurella o Choco Lozano, que están ahora en Primera o en Segunda".

"Allí los extremos juegan pegados a la línea para encarar y sacar centros. Mi perfil es más de ser extremo en un 4-4-2 que interviene más por dentro. Aquí tengo más libertad. Vine en febrero del año pasado, pero por el Covid no debuté hasta el play-off y ya estoy asentado con los compañeros, en la ciudad y en el club. Vuelvo a estar bien físicamente y estoy contento. La Segunda B es como un pozo del que cuesta mucho salir, pero podemos dar el salto ", comenta el cántabro.

Aunque confiesa "no ser muy futbolero" y a que sus colores son racinquistas, Concha está acostumbrado "a escuchar los lunes a Sergi y a Àlex comentar los partidos del Barça en el café (el equipo desayuna en grupo). Los más jóvenes están tirando del carro y el Barça tiene que apoyarse en proyecto de cantera con algunos retoques para volver a ser diferencial".