Los 'tempos' previstos con la renovación de Lamine Yamal

Jorge Mendes espera la llamada del Barça para empezar a tratar la ampliación del 'crack'

Mendes, contundente: “Claro que Lamine renovará con el Barça”

El agente atendió a los medios en la Gala del Golden Boy / SPORT.es

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

No es que hubiera runrún al respecto, pero en un ejercicio de anticipación, Jorge Mendes se mostró este lunes contundente a la hora de referirse al futuro de Lamine Yamal. "Claro que va a renovar con el Barça; Lamine es del Barça", aseguró en la gala del Golden Boy el agente luso. Detrás de esas palabras hay sinceridad pero también un punto de estrategia de cara a una negociación que todavía no arrancó pero lo hará en los primeros meses de 2025.

Lamine lo tiene claro: el Barça es el club de su vida y solo se imagina vistiendo la elástica azulgrana. Pero eso no va reñido con que su agente trabaje para lograr un contrato acorde con el caché del jugador, que desde la Eurocopa de verano ha subido tres o cuatro escalones de golpe.

Cuando el club catalán y Jorge Mendes cerraron la última renovación del jugador, con fecha de caducidad el 30 de junio de 2026, las partes dejaron medio acordada una ampliación extra hasta 2030 para cuando Lamine cumpliera 18 años. Sin embargo, la normativa FIFA juega en ese tipo de casos a favor del jugador, pues un hipotético litigio siempre le daría la razón. En otras palabras, a efectos legales esos pactos son más bien una declaración de intenciones que letras sagradas.

Un borrador ya caducado

Desde la última Eurocopa, el 'status' de Lamine no ha dejado de crecer. Tanto es así que las previsiones económicas que hicieron en su día tanto Barça como sus agentes han quedado ya desfasadas. El club asume que deberá retocar los números y el entorno de Lamine lo ve como algo normal teniendo en cuenta su ascendencia en el equipo de Hansi Flick y los premios individuales que empieza a coleccionar ya el jugador.

Barça y Lamine tienen claro que quieren continuar de la mano, pero ponerse de acuerdo tampoco será un abrir y cerrar de ojos. Las arcas del club no viven su mejor momento y además la entidad no quiere que la masa salarial vuelva a dispararse tras los esfuerzos de los últimos años por reducirla. El club hará un esfuerzo porque Lamine es la joya de la corona, pero hay cifras a las que no podrá llegar nunca.

El jugador ya cedió en la última renovación y ahora espera un contrato a la altura de su caché

Por su parte, el de Rocafonda ya asume que ganaría mucho más dinero fuera. Y en la última renovación ya se adaptó a la incómoda realidad económica del Barça. Es por eso que su representante entiende ahora que es justo y merecido que el jugador obtenga un contrato a la altura de lo que es Lamine: uno de los mejores jugadores del mundo. Como suele ser habitual últimamente, una de las opciones que puede facilitar las negociaciones es un contrato largo y ascendente, una fórmula que beneficia al club en términos de 'fair play'.

A día de hoy, las conversaciones entre las partes no han arrancado todavía. Se espera que lo hagan a partir de febrero o marzo una vez se hayan resuelto carpetas que están ya avanzadas, como es el caso de la ampliación de Pedri. Barça y entorno de Lamine tienen asumido que perfilar el nuevo contrato requerirá cierto tiempo, aunque siempre desde la voluntad de lograr un acuerdo y no de tensar la cuerda. Por eso mismo este lunes Jorge Mendes fue tan claro a la hora de hablar de la continuidad del '19': no quiere llevar a lo público lo que sí puede ser un pulso privado. Cada uno defenderá sus intereses pero parece claro que a la entidad que preside Joan Laporta le tocará rascarse el bolsillo. El mercado y el nivel de Lamine así lo exige.