La tarde que Messi dijo adiós al Barça sin saberlo

La tarde del 16 de mayo de 2021, Leo Messi jugó su último partido con el FC Barcelona. El último de 778, que se dice pronto. Fue contra el Celta de Vigo, el rival de los azulgranas este martes, en el Camp Nou y todo salió del revés. En ese momento, en la penúltima jornada de la pasada Liga, nadie se podía imaginar su marcha, mucho menos el propio futbolista. Una dura derrota en un vacío estadio por la pandemia que, con los acontecimientos posteriores, ha pasado a la historia del club.

Así fue su último gol, el 672

Messi fue titular y jugó los 90 minutos, pues todavía quedaba alguna opción, escasa, de conquistar la Liga. El 'diez' adelantó al Barça a los 27 minutos en el que acabaría siendo su último gol con la camiseta azulgrana. Y fue de cabeza. A centro preciso de un Sergio Busquets que lucía máscara protectora, Leo se desmarcó del joven Carlos Domínguez y remató cruzado sin que nada pudiera hacer Iván Villar. El gol número 672 del argentino en el Barça, máximo goleador de todos los tiempos. Y el último. Lo celebró sin grandes alardes por la situación del equipo, pasando por detrás de la portería y reconociéndole la asistencia a 'Busi'.

Después, el desastre. Solo transcurrieron diez minutos y un tiro aparentemente inofensivo de Santi Mina desde la frontal no fue tapado por Piqué y Ter Stegen hizo vista. No acabó ahí la cosa. En la recta final, el Barça se quedó con diez por la expulsión a Lenglet, Braithwaite falló a puerta vacía y Santi Mina aprovechó el rechace al travesaño a tiro de Solari para marcar el gol de la victoria. El delantero vigués tampoco estará en el Camp Nou, en su caso apartado por el Celta tras la sentencia judicial que condena a Mina a cuatro años de prisión por abuso sexual.

No viaja a Ipurua y el 5 de agosto, el 'bombazo'

Ronald Koeman, sin nada en juego, decidió dar descanso a Messi en el último partido de la pasada Liga, la visita del Barça a Ipurua (0-1 con gol de Griezmann). Tampoco viajó Pedri, al que el holandés dio vacaciones anticipadas. Y así que para la historia quedará que su último partido con el Barça fue la derrota ante el Celta en el Camp Nou, pues menos de tres meses después, concretamente el 5 de agosto, saltó la 'bomba'. El club azulgrana, mediante un comunicado, anunciaba que Leo no seguiría vinculado al club al que había llegado con solo 13 años. "A pesar de haber llegado a un acuerdo y con la intención de firmar un nuevo contrato, no se podrá formalizar debido a obstáculos económicos y estructurales (normativa de LaLiga española)", explicó la entidad. Días después, se despidió entre lágrimas y arropado por toda la plantilla.