Spotify, en Barcelona para firmar el acuerdo con el Barça

El Barça está a punto de anunciar el nombre del nuevo patrocinador de la camiseta del primer equipo. Directivos de la empresa sueca de reproducción de música en streaming hace días que están en Barcelona cerrando el acuerdo, que debería hacerse oficial la próxima semana.

Daniel Ek, director general de Spotify ha llevado personalmente las negociaciones con el Barça. Es un gran aficionado al fútbol y ya quiso en su día comprar el Arsenal.

El Barça y Spotify negocian desde hace meses un acuerdo global que también incluirá, como avanzó Catalunya Ràdio, los title rights del Camp Nou. Alcanzar un acuerdo de estas características era un objetivo de la junta directiva del Barça, pues ayudará a lograr un mejor trato con los inversores que, bajo el liderazgo de Goldman Sachs, han de prestar 1.500 millones de euros al club para la construcción del Espai Barça.

El acuerdo con Spotify por la camiseta del primer equipo reportará al club unos 60 millones de euros por temporada e incluirá también otros conceptos, como la parte trasera de la camiseta de entrenamiento. El acuerdo podría cerrarse para las cuatro próximas temporadas, con posibilidad de ampliación.

Queda libre, de momento, la manga de la camiseta. El club ha negociado con Polkadot, que estaba dispuesto a pagar casi la mitad de lo que pagará Spotify por el frontal de la camiseta, solo por la manga, pero no acaba de ver claro el Barça el negocio de las criptomonedas.

REVERTER VUELVE DE MIAMI

Paralelamente, el Barça y Spotify han negociado otro acuerdo por los title rights del Camp Nou. No está claro que se anuncie junto al de la camiseta del primer equipo porque es más complejo. Esperan en el club las noticias que el director general, Ferran Reverter, traiga de Miami. Ha estado toda la semana en Estados Unidos negociando con los inversores del Espai Barça y debía aterrizar hoy en Barcelona. Las negociaciones con los inversores son importantes también en el acuerdo por los title rights. Reverter aseguró en rueda de prensa que barajaban la cifra de 400 millones por 20 años. Un contrato de estas características sería bien visto por los inversores, pero el Barça es partidario de cerrar uno por menos tiempo, a diez o doce años.