"Soy el Dr. Valverde. ¿En qué puedo ayudarle?"

Ernesto Valverde tiene una varita mágica

Ernesto Valverde tiene una varita mágica / Valentí Enrich

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

En las ruedas de prensa da poco de qué hablar. Trata de apagar los incendios, mantiene un tono conciliador y raramente deja grandes titulares. Ernesto Valverde no es lo que dice, sino lo que hace. Y, de momento, por cierto, lo hace muy bien. El Barça tiene media Liga en el bolsillo cuando solo estamos en enero, ha pasado a octavos de la Champions como primero de grupo y, eso sí, está a expensas de una remontada ante el Espanyol en Copa del Rey para acceder a semifinales. Sin embargo, lo que más valora el vestuario azulgrana no son los resultados, sino la habilidad del técnico para sacar la mejor versión de varios de sus jugadores.

Hombres como Jordi Alba, Vermaelen, Iniesta o Paco Alcácer han dado un enorme paso adelante respecto a la última temporada. Otros, como Busquets o Rakitic, también han mejorado, mientras que Paulinho ha encajado en el equipo a la perfección. Lo de Messi solo lo explica la magia del argentino, mientras que Luis Suárez fue durante un mes la única asignatura pendiente del 'Txingurri'. De nuevo cerca del área en el 4-4-2, el uruguayo ha vuelto por sus fueros.

JORDI ALBA

El lateral se ha convertido en el auténtico sustituto de Neymar. El propio Alba ha reconocido que se encuentra en uno de los mejores momentos de su carrera y sus números así lo demuestran: suma ya dos goles y nueve asistencias, lo que le convierte en el mejor socio de Leo Messi. El ex del Valencia ha dejado atrás las dudas que le surgieron en la última temporada de Luis Enrique, cuando fue suplente en varios partidos clave del curso. Ahora mismo, es sin duda el mejor lateral izquierdo del mundo.

VERMAELEN

El belga ha pasado de no contar a convertirse en un hombre muy a tener en cuenta. La lesión de Umtiti le abrió las puertas y la verdad es que ha respondido a un nivel excelente. Thomas se ha mostrado seguro por arriba y por abajo, sin errores en la salida de balón y contundente y expeditivo a la hora de cortar y despejar balones. El tiempo ha dado la razón a Valverde, quien desde el primer día ha confiado en el belga de 32 años. Ahora lesionado, el ex del Arsenal espera no dar un paso atrás en su brutal mejora.

INIESTA

El manchego fue poco protagonista la temporada pasada y ahora ha vuelto a ser lo que siempre fue: un jugador clave en el centro del campo. Su entendimiento con Messi, su calidad y su pausa son la mejor receta de un Barça que vuelve a controlar los partidos. Iniesta agradece la apuesta por el juego de control de Valverde y es así como está recuperando su mejor versión. Ni siquiera alguna que otra lesión priva al capitán azulgrana de la matrícula de honor.

ALCÁCER

El de Torrent suma ya cinco goles y tres asistencias en este curso, a solo tres dianas y un pase de gol de igualar sus registros del curso pasado. Alcácer fue decisivo ante el Sevilla con un doblete y después fue clave en el triunfo en Leganés. Además, en Villarreal salió desde el banquillo para dar una precisa asistencia a Suárez en el 0-1. El ariete ha perdido los complejos y se le nota ya sin presión, sin miedo a equivocarse. Ha demostrado que puede ser un buen revulsivo, aunque su última lesión -su reaparición es inminente- ha frenado en seco su dulce momento.

ANDRÉ GOMES

Su caso no es tan acentuado. El luso progresa pero lo hace sin prisas. Sin embargo, Gomes ha experimentado una gran evolución respecto a la temporada pasada. Es cierto que sigue jugando con miedo. Aún no se ha desmelenado pero sí se le ve más implicado y mejor físicamente. La 'terapia' de Valverde está funcionando, aunque la entrada en escena de Coutinho limitará, seguramente, sus apariciones a partir de ahora.

Además de estos cinco jugadores, a Rakitic y Sergio Busquets también se les ve más frescos que el curso pasado. El croata no va tan ahogado y, aunque su tarea hoy es más defensiva, es más fiable y llega mejor al tramo final de partido. A nivel goleador, sus cifras se han visto algo perjudicadas, pero Ivan sigue conservando el olfato y dio buena muestra de ello en el Villamarín. Por su parte, Busquets, el termómetro del Barça, agradece que el equipo esté más junto: brilla más en la salida de balón y sufre menos en defensa.