Arranca la semana grande

El barcelonismo encara el final de febrero con una inquietante sensación de déjà vu. Lo vivido en Lyon y la cómoda posición en la Liga recuerdan demasiado a lo ocurrido las últimas temporadas. Un Barça dominante en la Liga y un equipo sin respuestas fuera de casa en Europa.

Una sensación preocupante, a pesar de que Valverde ha introducido algún matiz esta temporada: Messi y Suárez también entran en las rotaciones, sobre todo en la Copa. 

El Barça necesitará su mejor versión para tener éxito en la semana que se le viene encima. Para empezar hoy un Sevilla-Barça (16:15 horas/beIN LaLiga) y luego doble clásico en el Bernabéu; primero la vuelta de Copa el miércoles y luego la Liga el sábado dos de marzo.

Aparcada la Champions (el motor de esta temporada, “la copa tan linda”) hasta el 13 de marzo, habrá que ver qué hoja de ruta sigue Valverde en los próximos partidos. 

El técnico es poco partidario de mirar a largo plazo. En sus decisiones, incluso en su relación con el club, se sabe siempre en una cuenta atrás. De ahí que su máxima preocupación desde que aterrizó en Barcelona haya sido el presente. El próximo partido. Es decir, este Sevilla-Barça que llega cuando el culé sigue dándole vueltas al partido en Lyon. Un encuentro que dejó varios datos preocupantes. 

Alguno demoledores: la última vez que el Barça ganó fuera de casa en una eliminatoria de Champions fue el 23 de febrero de 2016 ante el Arsenal en la ida de los octavos. Pero hay más: sólo Messi ha marcado lejos del Camp Nou en las eliminatorias. Unos números que salpican de manera directa a Suárez: hace tres años y medio que no marca lejos de casa ¿Síntoma de un problema grupal o tendencia a la baja del ariete? Habrá que verlo las próximas semanas. 

LAS DUDAS DE VALVERDE

El papel de Suárez y Messi los próximos siete días es una de las grandes dudas de Valverde. Habrá que ver hasta qué punto el técnico se deja llevar por la dimensión de los clásicos. De momento, en la ida de la semifinal copera fue coherente y dejó a Leo en el banquillo. 

El argentino no ha estado fino en los últimos encuentros, todavía renqueante de sus molestias. En Lyon se vio una versión muy participativa del argentino, pero extrañamente sin la pausa que siempre caracteriza al argentino. Peor estuvo Suárez, que nunca se encontró.

El encuentro sirvió también para que futbolistas como Dembélé sigan acercándose a su mejor nivel. El francés fue titular pero fue sustituido por Coutinho a las primeras de cambio en la segunda parte. Una opción para Valverde sería juntarlos en el once de hoy en el en el césped del Pizjuán y dar descanso a Messi o Suárez. 

La gran sorpresa fue la suplencia de Arturo Vidal (Sergi Roberto ocupó el interior derecho) y se espera que el chileno regrese al equipo. El Txingurri también deberá gestionar la situación de Lenglet y Rakitic, que se encuentran a una tarjeta de la suspensión. A siete puntos del Atlético, segundo en la Liga, y a nueve del Madrid, el partido en el Bernabéu del sábado aparece como el más complicado.

Antes el conjunto azulgrana necesita una buena actuación hoy para encarar bien la semana y mejorar las sensaciones. En los últimos ocho encuentros el Barça acumula tres victorias, cuatro empates y una derrota. 

Una racha a la que han contribuido la bajas de futbolistas clave como Dembélé (ya recuperado) o Arthur. Al Barça le espera ahora el Sevilla de Machín. Otra vez el Sánchez Pizjuán. Y luego repite contra el Madrid como si fuera el día de la marmota. Un calendario angustioso y toda una prueba de fiabilidad para los de Valverde.