La servilleta del contrato de Messi, ¿para cuándo en el Museu del Barça?

Horacio Gaggioli la tiene enmarcada y a buen recaudo en la caja fuerte de un banco andorrano

La nueva directiva tampoco se ha interesado hasta ahora, pese a la predisposición de quien fue clave en la llegada de Leo a Barcelona hace 21 años

Horacio Gaggioli y la célebre servilleta que propició el fichaje de Messi por el Barça

Horacio Gaggioli y la célebre servilleta que propició el fichaje de Messi por el Barça / Javi Ferrándiz

German Bona

German Bona

Leo Messi, por muy duro que suene, ya no es presente del FC Barcelona. Quedará para siempre su recuerdo vestido de azulgrana, sus goles, sus conquistas, aquellos 'chorreos' en el Bernabéu... y la servilleta con un 'contrato' firmado a bote pronto que lo propició todo. Nada hubiera sido posible en esta historia sin Horacio Gaggioli, persona clave en la llegada de Leo hace 21 años.

La historia de la servilleta

Por aquel entonces, Gaggioli tenía dos socios en Argentina, Fabián Soldini y Martín Montero, que le hablaron de un chaval que hacía diabluras en Rosario con solo 11 años. Como pasaba el tiempo, el club no se decidía y la familia se impacientaba, Horacio contactó con Rexach y el 14 de diciembre del año 2000 se firmó junto a Josep Maria Minguella, que le había conseguido una prueba en el Barça, el famoso 'contrato' en una servilleta por el que Charly se comprometía a fichar a Leo "pese a algunas opiniones en contra".

Lo que después sucedió es de sobras conocido. Una carrera meteórica y sin parangón. El barcelonismo ha disfrutado del mejor jugador del mundo y la servilleta debería ser una pieza de museo. Está desde hace tiempo a buen recaudo. Gaggioli la protocolarizó en una notaría, la enmarcó y la guardó en una caja fuerte de un banco de Andorra.

En un entrevista concedida SPORT hará casi un año, cuando el barcelonismo estaba en shock por el burofax de Leo pidiendo salir, Gaggioli explicó que su voluntad siempre ha sido que la servilleta se exponga donde le corresponde, en el Museu del FC Barcelona, a la vista de todos los barcelonistas. "No sé cuáles son los motivos por los que de momento no está. Siempre se consideró que era una especie de contrato, aunque en realidad era un compromiso y sin dinero de por medio, y que no procedía. Pero yo siempre estuve a favor y si algún día sale de Andorra, será para el museo del club", aseguró textualmente. Nunca la ha querido vender, y eso que propuestas, algunas hasta exóticas, no han faltado.

Predisposición intacta

Messi finalmente se quedó en el Barça toda la temporada, pero ahora ya no hay vuelta atrás. Ha cambiado la junta directiva del club azulgrana, pero la servilleta sigue en el Principat porque no ha habido movimientos para su traslado. La predisposición de su propietario, según ha podido saber este diario, no ha cambiado. Horacio es un hombre de palabra.

Quizás ahora son días de incredulidad, de digerir lo que ha sucedido, pero no debería de tardar en llegar el momento en que la servilleta 'vea la luz' y pase a ser patrimonio del barcelonismo. Como el propio Messi, aunque se vaya a jugar a mil kilómetros de distancia, siempre lo será.