Sergi Roberto ya ha jugado de todo... menos de portero

Sergi Roberto en una acción del Barça-Granada de la Liga 2019/20

Sergi Roberto en una acción del Barça-Granada de la Liga 2019/20 / EFE

Jordi Gil

Jordi Gil

Sergi Roberto ha superado los diez años desde que se asomó en el fútbol profesional. Su primer paso fue en el Barça B. El 21 de septiembre de 2009 se estrenó con 17 años en La Bòbila de Gavà de la mano de Luis Enrique Martínez como interior izquierdo. Entró en el descanso por Luque y contribuyó a la victoria por 1-3 con los goles decisivos de Gai Assulin y Jonathan Soriano.

Con el asturiano aprendió a jugar en todo tipo de posiciones. Una polivalencia que le ha permitido actuar en el mundo del fútbol en todas las posiciones del campo…con la única excepción de la portería.

Frente al Granada (1-0) Sergi conoció una nueva demarcación, la de central diestro en defensa de tres. Una situación que Luis Enrique ya había anticipado para el de Reus, aunque finalmente no tuvo que activarla. “Sergi podría jugar de central, ya lo ha hecho de falso nueve, menos de portero, puede jugar de todo”, había explicado.

DE '9' CON GARCÍA PIMIENTA

El actual seleccionador español era perfectamente conocedor de que Sergi Roberto se había movido por el centro del ataque cuando actuaba en el Juvenil B con Javier García Pimienta. En la temporada 2008-09 fue el Pichichi de la Liga Nacional con 20 goles demostrando que era mucho más de un centrocampista convencional. 

Un año más tarde ya ascendió al Barça B con 17 años, donde básicamente fue interior, hasta tener la oportunidad de debutar en la Champions League con el primer equipo ante el Real Madrid. Salió por David Villa en la recta final de las semifinales y se situó en el extremo izquierdo. La posición en la que ha jugado de manera más ocasional.

De extremo derecho ha tenido mayor protagonismo. Uno de sus partidos más brillantes fue en noviembre del 2015 en el Santiago Bernabéu. Con Leo Messi en el banquillo saliendo de una lesión, Luis Enrique lo situó por delante de Dani Alves y Sergi fue determinante. Volvió loco a Marcelo y de sus botas partió una gran asistencia para que Luis Suárez inaugurara el marcador.

LA RECONVERSIÓN A LATERAL

Antes de su reconversión como lateral, dónde más jugaba era de centrocampista, incluso de medio centro. En marzo de 2015 tuvo una de sus mejores actuaciones por delante de la defensa en Ipurua frente al Eibar.

Su carrera, sin embargo, dio un vuelco en el inicio de la campaña 2015-16. La lesión de Alves en San Mamés le abrió la puerta del lateral diestro donde se consolidó y se ganó por fin el rol de titular indiscutible.

Su buena adaptación a la defensa ha provocado que también actúe esporádicamente de lateral zurdo. Nuevamente fue Luis Enrique quien lo bautizó en esta demarcación en un exigente duelo copero en San Mamés ante el Atheltic el 20 de enero de 2016. Sergi no solo cumplió, sino que secó al veloz Iñaki Williams.

Ya no le quedaban más posiciones por conocer hasta que Quique Setién pensó en él como central diestro en una defensa de tres. Su excelente salida de balón y buena colocación son argumentos que convencieron al cántabro para darle este papel frente al Granada y se comprobó que Luis Enrique tenía razón. Sergi Roberto puede jugar de todo, menos de portero.