¡Séptimo gol de Leo Messi de falta en Liga!

Minuto 90. El Barça, por deméritos propios, perdía 4-2 ante el Villarreal, que había sido capaz de remontar un 0-2 adverso. Cuando se mascaba el descalabro, apareció el de siempre, el que nunca se esconde: Leo Messi. Se hizo con el balón cerce del área, metió la sexta marcha y, claro, solo pudieron detenerle con una falta alevosa. El público del estadio de La Cerámica, henchido de alegría, no se imaginaba lo que estaba a punto de suceder. Messi cogió el esférico, le dio vuelta, lo mimó y lo depositó con tacto en el punto indicado. Después, como es habitual en él, miró de reojo, con disimulo, dónde quería meterle el balón. Y sí, allí, justo allí donde él quería ponerla, la metió. Un golazo de falta directa por toda la escuadra después de golpear en la madera.

No hace falta añadir nada más sobre Messi. Sólo que ya lleva siete goles de tiros directos esta temporada, un cifra asombrosa, como sus 32 goles en Liga este curso que refuerzan su liderato en el Pichichi. Y después del golazo de Leo, el de Luis Suárez. Los dos, en tres minutos, hicieron posible el milagro. De 4-2 al empate a cuatro.