El secreto de Iñaki Peña para parar penaltis

Iñaki Peña ha demostrado una gran habilidad parando penaltis

Iñaki Peña ha demostrado una gran habilidad parando penaltis / FC Barcelona

Jordi Gil

Jordi Gil

Iñaki Peña se ha ganado a pulso la fama de ‘parapenaltis’. Desde que juega en el Barça B ha parado cuatro de siete, además del de la tanda ante el Badajoz en el ‘play-off’. Iñaki revela el truco: “Es algo que trabajamos con Busi, el entrenador de porteros. Él ve los vídeos de los rivales y me filtra los posibles lanzadores, por dónde los t iran...  Luego te da libertad, no me dice, tirate por aquí o por allá. Cuando sucede, tomo la decisión  en función de lo que sé, el minuto de partido, el rival, el marcador...”. Y la fórmula está funcionando.

Iñaki es metódico en el trabajo y la normalidad marca su vida. Tanto en el Barça como en la Federación Española están encantados con su personalidad. Lo definen como una persona discreta y tranquila, siempre con una gran predisposición. El jugador habló para SPORT de su forma de ser y confirma los comentarios. Incluso sorprende por no permitirse algunas licencias que se salen del guión, como acostumbra a pasar con los porteros. 

Sin supersticiones

No soy maniático: no llevo toallas, ni botellas, ni miro el pie con el que entro. No me ha dado por ahí”, explica IñakiEl alicantino se fía mucho más del estudio de los rivales y sus propias condiciones que de factores ajenos, como la suerte, para superar las distintas situaciones de los partidos.

Fuera de los campos de entrenamientos o estadios tampoco hace nada fuera de lo que se considera convencional. “Me gusta estar en casa, con la familia. Ver series, partidos de fútbol y otros deportes”, destaca. El basket y el tenis son los deportes que más le llaman la atención, aunque aclara que “miro todo los deportes”.

Tenis y pádel

En sus vacaciones practica a veces “el tenis o el pádel porque son los que llevan menos riesgo”, aunque prefiere relajarse y desconecta en la playa. 

En realidad,  Iñaki no acostumbra a desconectar mucho ya que después de los partidos “me voy a casa con la familia y si puedo, lo veo otra vez repetido”. Le gusta analizar, aunque por ahora “no me veo en el futuro como entrenador”.

'Ping-pong' y parchís

En las concentraciones, el blaugrana se descanta “por el ping-pong o el parchís. Aunque muchos juegan a la Play, yo hace mucho tiempo que no la toco”.  Quizá se más tradicional por no ser un “millennial” por apenas diez meses. Nació en marzo de 1999. Su formación en la Masia le ha ayudado para estar alejado de los tópicos extravagantes de muchos futbolistas.