Saúl Ñíguez, el futbolista que pudo ser del Barça en cinco ocasiones

Pocos futbolistas pueden presumir de ser tan queridos por el Barça a pesar de que nunca se ha dado la opción de poder vestir la camiseta blaugrana. Saúl Ñíguez estuvo cinco veces a punto de firmar por el Barça, pero entre la falta de acuerdo económico y los movimientos del Atlético de Madrid para retenerle, siempre fue imposible que acabara en el Camp Nou. Saúl finalmente salió del Atlético cedido dos años al Sevilla, dónde está intentando recuperar su mejor versión de un futbolista que puede ser decisivo en el encuentro contra los de Hansi Flick.

La curiosa historia de Saúl con el Barça se inició en el 2013, cuando el club blaugrana se quedó una opción preferencial sobre el entonces jovencísimo jugador. Fue en la operación en la que David Villa acabó prácticamente regalado hacia el club colchonero y el Barça, como compensación, se ganó el derecho de tanteo por futbolistas que destacaban en la cantera rojiblanca como Ñíguez, Manquillo u Oliver Torres. Ya entonces, el club blaugrana sopesó un movimiento por el centrocampista, pero decidieron que siguiera en el Atlético.

Fe en el 2016 cuando el Barça iba a apostar por Saúl Ñíguez. El club blaugrana estaba dispuesto a pagar su cláusula de rescisión, que era de 40 millones de euros, pero el Atlético consiguió renovarle in extremis y doblarle su cláusula de salida. Pero la jugada siguió. Miguel Ángel Gil Marín explicó que en el 2017, el presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, le pidió precio por Saúl Ñíguez. Los colchoneros se negaron a venderle y el Barça iba a abonar su cláusula de 80 millones, pero el Atlético consiguió mejorarle la ficha y, por tres días, evitó el movimiento del Barça. El precio del jugador subía ya a los 150 'kilos' y el Barça se retiró de la puja.

Bartomeu lo volvió a intentar en el 2019 por petición de la dirección deportiva y siempre tuvo las puertas cerradas y ya en el 2021 fue la ocasión en la que más cerca estuvo de cuajar su llegada al Barça. Los dos clubs negociaron un cambio de jugadores en el que Griezmann se iba para el Atlético y Saúl al Barça, pero finalmente todo se rompió porque no se consensuaron las cantidades que los colchoneros debían abonar en contraprestación. El francés acabó saliendo cedido y, luego, traspasado a muy bajo coste en otra operación beneficiosa para los rojiblancos.

Saúl Ñíguez, al final, no acabó bien en el Atlético. Hubo desgaste en su relación con Diego Simeone y, primero, salió cedido al Chelsea, para luego regresar, pero este pasado verano ya se buscó una solución definitiva. Saúl salió hacia el Sevilla cedido un año con opción a prorrogar por otro año más. No volverá a vestir la camiseta rojiblanca.