Sandro Rosell vio y celebró en libertad el triunfo del Barça ante el Real Madrid

Sandro Rosell y su socio Joan Besolí, que han permanecido en la cárcel un año y nueve meses, primero en Soto del Real y después en Brians 2, gozaron en la tarde de ayer, a partir de las siete, de sus primeras horas de libertad tras recoger sus enseres particulares del centro penitenciario madrileño.

Acompañados de sus familiares y amigos, todo fue alegría al abandonar Soto del Real después de lograr la ansiada libertad condicional, otorgada por la sala de lo pena de la Audiencia Nacional.

Durante algunos momentos se especuló con la posibilidad de que Sandro Rosell aprovechara sus primeras horas para asistir al Santiago Bernabéu a presenciar el Real Madrid-Barça de semifinales de la Copa del Rey. Sin embargo, por recomendación de sus letrados y amigos, y por decisión propia también, Rosell prefirió mantener un perfil bajo, no dejarse ver y prepararse para los siguientes días de juicio que todavía quedan en búsqueda de la absolución.

Rosell fue visto en el restaurante del hotel donde está alojada su esposa y sus hermanos y que sirve de cuartel general de la familia mientras dura el juicio en Madrid. Sin duda, como gran culé que es (durante su declaración dijo "cuando hablo del Barça se me va la olla") disfrutó muchísimo del gran triunfo del equipo de Valverde frente al Madrid de Solari. Sin duda, dos grandes alegrías el mismo día. Una a título personal y otra en su condición de barcelonista y ex presidente del FC Barcelona.