Robert Gonçalves: "Quiero ser mejor que Neymar"

Con solo 15 años, Robert Gonçalves se convirtió en una de las grandes esperanzas del fútbol brasileño. Su sentido lúdico del juego, su eterna sonrisa y su habilidad hicieron que fuera comparado de inmediato con Neymar. Robert llevaba el dorsal '10' en la espalda y era la comidilla de las inferiores del Fluminense. 

Era el año 2011 y Robert se ponía el listón por las nubes en la primera entrevista que concedía a un medio, a pocos meses de firmar su primer contrato profesional. "Neymar es el ahora el gran ídolo del fútbol brasileño. Y también un modelo para mí. Seguramente no llegaré a ser como él, pero me gustaría ser mejor. Todo el mundo habla que somos parecidos. Las chicas siempre me lo dicen, pero yo soy más lindo", aseguraba entre risas a 'Globoesporte'. 

Desde entonces la carrera del mediapunta, al que también se compara con Coutinho, no ha sido tan fulgurante como la de Neymar, a pesar de que ya ha debutado con la absoluta y ha jugado varios encuentros con el primer equipo del Fluminense. La cesión al Barcelona no parecía entrar en los planes del mediapunta, que ya viaja a Barcelona, cuando estaba en las inferiores del club brasileño. 

Así se veía Robert cuando tenía 15 años:

Pensaba en ser un referente en Brasil

"No me importa el acoso de otros clubes. Quiero quedarme en Brasil y hacer carrera en el Fluminense, un club que siempre me ha dado pleno apoyo. Todos los que conozco que se han ido muy temprano a Europa han queriendo volver. Se pueden estropear mucho y hace que el jugador pierda lo que podía lograr en su país".

Un ídolo de infancia

"Desde pequeño siempre me gustó mucho ver a Ronaldinho"

Sus inicios humildes

"Nunca tuve lo que quería durante mi infancia. No teníamos coche ni nada. Mi padre ni siquiera podía comprarme unas botas. Yo veía a los otros chicos y pensaba: ¿Cuando podré tener unas como esas? Era complicado pero mi padre siempre decía: 'Tendrás todo lo que quieras, sólo confía en el hombre de arriba [se refiere a Dios]. Y gracias a Dios los años fueron pasando y todo mejoró".

Su estilo 

"A mi madre no le importa la ropa que me pongo o si llevo pendientes. Simplemente me lleva más tiempo antes de salir de casa. En el campo, tengo facilidad para driblar y dejar a los compañeros en una buena situación para el gol. Llevo el '10', soy diestro, peor estoy mejorando con la izquierda".

La presión

"La presión existe, pero confío en Dios.Tengo solo 15 años y todo por llegar. A veces es difícil lidiar con algunas situaciones. Pero a veces tienes que renunciar a ciertas cosas para cumplir tus sueños.Siempre trato de mantener la humildad porque en el fútbol un día estás arriba y otro abajo".