Riqui Puig: rondos y play station

Javier Rodríguez Marzo

Javier Rodríguez Marzo

<strong>Arthur</strong> aparte, está siendo una de las grandes sensaciones de la gira americana. Riqui Puig simboliza el revival de la cantera. El despertar de un modus vivendi que ha hecho grande a la marca Barça, al estilo y a los valores del que se denomina más que un club.

<strong>Llevamos tiempo esperando que un canterano dé el salto definitivo</strong> (el último fue Sergi Roberto) y todo el mundo ve a este jovencito de 18 años como el principal candidato. Culé de cabeza a los pies (su padre le hizo socio bien pequeño) solo con verlo jugar se sabe que posee un don especial.

Lo decía el propio Sergi Roberto. "Desde que comenzó a entrenar con nosotros el año pasado ya me di cuenta que tiene el juego Barça. Si sigue trabajando así, tendrá su oportunidad", aseguraba.

No solo los jugadores, también Valverde es consciente que este chico tiene madera de crack. Por eso desde el primer entrenamiento en esta gira, allá en Portland, en las instalaciones de Nike, le hizo participar en los rondos con los jugadores del primer equipo. Y lo ha seguido haciendo en Los Ángeles y Dallas. Los otros canteranos montan el suyo aparte.

Pero Riqui es el elegido. Da el perfil de la casa, posee el gen que recuerda que, como demostraron Xavi e Iniesta, no hace falta ser grande para ser un grande del fútbol. Puig sigue la estela de ambos mitos y guardianes del estilo barcelonista, pero quiere ir paso a paso. Sin prisas pero sin pausas.

<strong>El primer sueño, el del debut ante el Tottenham, ya está cumplido</strong>. Lo demás llegará en su momento. Mientras, sus compañeros y técnicos miman a este crack en ciernes al que en la mañana de ayer vimos por el lobby del hotel The Joule de Dallas subiendo a su habitación con un ordenador y... el mando de la play station.