Ansu Fati: redebut, golazo, gratitud y futuro

Jugará un máximo de 15 minutos”, dijo Ronald Koeman en la previa del Barça-Levante. Al final fueron 9 minutos del tiempo reglamentario más los cuatro del agregado. Suficiente, sin embargo, para que Ansu Fati se erigiese como el protagonista del partido e ilusionara con su frescura y efectividad a la deprimida parroquia azulgrana, que no saboreaba un triunfo de su equipo desde el 29 de agosto, contra el Getafe (2-1) en el Camp Nou.

En estos 13 minutos (9+4) Ansu Fati dejó unos números que invitan, de su mano, a regresar a los buenos tiempos. Si en 13 minutos fue capaz de anotar, forzar un penalti que el árbitro no quiso ver (cometido por Pablo Martínez en el minuto 84) y levantar el ánimo del equipo y la afición, ¿de qué será capaz cuando pueda rendir al cien por cien y en todo el partido?

Radiografía

Ansu Fati salió en el minuto 81 por Luuk de Jong. Integró un triple cambio junto a Demir y Araujo, que entraron por Nico y Mingueza, respectivamente. Desde entonces, la grada solo tuvo ojos para el delantero, que recibió el incondicional apoyo de la grada (ya lo tuvo cuando empezó a calentar en la banda) y el aliento de su familia, en especial de su padre Bori y su hermano Braima, ambos luciendo la camiseta azulgrana.

El ‘10’ del Barça, en esos 13 minutos, marcó un gol, hizo 16 toques, ganó tres duelos, dio un pase clave y tuvo un acierto del 89% en el pase (dio ocho bien de los nueve que realizó). También le bloquearon un disparo en el área y, según el mapa de calor, Ansu Fati evolucionó, principalmente, por la punta izquierda del ataque.

Demostró, igualmente, que regresó en muy buen estado físico y evidenció punta de velocidad, resistencia en el cuerpo a cuerpo y profundidad. Tras el gol, además de saludar a su hermano, se acercó al doctor Lluís Til, que siempre estuvo a su lado, especialmente en los momentos más duros de la lesión. Ansu sumó ayer su partido 44 y su decimocuarto gol.