FC Barcelona, 1 - Manchester City, 0

Recital de Messi... y a cuartos

Rakitic marcó un gran gol tras recibir una brillante asistencia de Messi

Rakitic marcó un gran gol tras recibir una brillante asistencia de Messi / sport

Ricard López

El Barça entró por la puerta grande en el selecto grupo de ocho clubs -junto a Bayern, Real Madrid, PSG, Oporto, Atlético, Mónaco y Juventus- que se jugarán el pase a semifinales de la Champions. Y lo hizo, una vez más, de la mano de su gran estrella. Un Messi genial pero al que, paradójicamente, el gol le dio la espalda de forma incomprensible. La falta de acierto de los 'Tres Tenores' privó al Camp Nou de ver una goleada de escándalo. El único tanto del partido llevó la firma de un centrocampista: Ivan Rakitic. Aunque el gran protagonista fuera, como casi siempre, el '10'. El Barça demostró que llega en un buen momento a su 'semana grande'. Después de eliminar al City, este domingo le espera el plato fuerte de la Liga ante el Real Madrid. Cristiano Ronaldo no sabe la imprudencia que cometió con su sonrojante grito al recoger el Balón de Oro el pasado mes de diciembre. Casualidad o no, desde ese día las tornas han dado un giro de 180 grados tanto en el plano individual como en el colectivo. Messi le ha superado como 'pichichi', y el Barça ha alcanzado el liderato.

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Champions (Octavos, vuelta)

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Alineaciones
Barça
Ter Stegen; Alves (Adriano, min.91), Piqué, Mathieu, Jordi Alba; Mascherano, Rakitic (Rafinha, min.83), Iniesta; Messi, Luis Suárez y Neymar.
Manchester City
Hart; Sagna, Kompany, Demichelis, Kolarov; Nasri (Navas, min.46), Fernandinho, Toure Yaya (Bony, min.71), Milner (Lampard, min.87), Silva; y Aguero.

Los azulgranas pisan fuerte en todas las competiciones y en la Champions no fue menos. El City, que ya lo tenía difícil después de perder 1-2 en la ida, poco pudo hacer para contener el vendaval de fútbol que se le vino encima. Y suerte tuvo de no volver a Manchester con un saco de goles. Algo en lo que tuvo mucho que ver el acierto de su portero Hart. El mejor, de largo, de los ingleses. Lejos de especular, el Barça fue al grano, atacando desde el pitido inicial. Sólo en la primera mitad, estrelló dos remates en el poste (Neymar, en el 7', y Suárez, en el 43'). Y dispuso de hasta media docena de ocasiones claras: un chut de Messi que paró Hart (14'), dos lanzamientos de falta del '10' que salieron fuera por muy poco (17' y 29')... pero la falta de puntería fue la nota negativa de una gran noche de fútbol.

Tuvo que ser Rakitic quien, cumplida la media hora, hiciera justicia en el marcador. El croata marcó el 1-0 en el 31', superando a Hart con una sutil vaselina después de recibir un gran centro de Leo Messi en una contra iniciada por Jordi Alba.

Conducido en la media por un Iniesta inspirado, y bien secundado por Mascherano, -otra buena señal de cara al clásico-, los azulgranas acorralaron a un City que sólo reaccionó después del descanso. Los de Pellegrini perdieron incluso los nervios en algunas fases, cargándose muy rápido de tarjetas con sus faltas desesperadas.

Pero las cosas cambiaron en la reanudación. El Barça salió en tromba, y en apenas tres minutos -los que van del 45' al 48'-, puso en aprietos a Hart con cuatro remates de Messi, Rakitic, Jordi Alba y Neymar. Pero el City, consciente de lo que se jugaba, pisó el acelerador, convirtiendo el partido en un toma y daca. Touré Yayá tomó el mando en ataque, imponiendo su zancada y potencia física. Y el Barça empezó a sufrir. Porque perdió el control en la medular. Y porque bajó la guardia en la presión. En ese escenario, los ingleses se crecieron. Y rozaron el gol en varias ocasiones, aproximándose con peligro a las inmediaciones de Ter Stegen. Por suerte, les faltó tino en los últimos metros. No faltaron los típicos 'yayazos' -el ex blaugrana se llevó una fuerte ovación de la 'gent blaugrana' antes del partido y al ser sustituido por Bony, en el 71'-. E incluso un penalti fallado, por un claro derribo de Piqué a Agüero en el área local. Pero Ter Stegen, sólido, le paró la pena máxima al argentino (78').

El Barça jugó con fuego y estuvo cerca de quemarse, poniendo en peligro la eliminatoria. Cuesta entender cómo los de Luis Enrique llegaron a fallar tantas y tantas ocasiones en un partido que tuvieron controlado hasta la segunda parte. Messi (63', 78' y 88'), Suárez (60' y 85') y Neymar (75', 91') siguieron perdonndo lo que no está escrito. Hubo otro gol -anulado por fuera de juego-, y tampoco fue de un delantero, sino de un defensa: Jordi Alba (70'). Esa precipitación, y falta de puntería son, sin duda, las grandes asignaturas pendientes de cara al clásico del domingo. Ante el Madrid, en la Liga, tampoco se puede fallar.