Lío con el futuro de Mascherano en el Barça

Mascherano puede irse

Mascherano puede irse / sport

El culebrón Mascherano puede tener un desenlace inesperado. Y es que la insistencia del jugador y las cantidades que podría percibir el Barça del fútbol chino podrían precipitar la salida del argentino durante el mes de enero. Los técnicos no quieren que Mascherano salga y así se lo han comunicado, pero el Hebei Fortune chino está dispuesto a pagarle cifras que doblarían su ficha blaugrana. En los próximos diez días se definiría una situación no deseada y que puede hacer variar, en parte, la planificación en cuanto a fichajes.

Mascherano comunicó al Barça, a principios de noviembre, su intención de abandonar la entidad blaugrana para comenzar una aventura en China. Consideraba que era el momento oportuno y que en el pasado ya hizo esfuerzos rechazando propuestas como la de la Juventus para seguir en el Barça. La noticia sorprendió a técnicos y compañeros porque es año de Mundial, pero el Barça sí que le dejó claro que no estaba por la labor de dejarle marchar.

El futbolista argentino ha ido insistiendo en las últimas semanas y ha pedido de forma expresa al Barça que escuchen la oferta China. Oficialmente, esta propuesta aún no ha llegado, pero los intermediarios de la operación aseguraban que no sería superior a los seis millones de euros. Y es que la nueva legislación en China penaliza operaciones superiores a esa cantidad con fuertes impuestos. La ficha del jugador sí que sería multimillonaria.

En el Barça consideran que estas condiciones no son aceptables, aunque su postura ha variado algo estos últimos días. Si hace unas semanas la idea era cerrarle totalmente las puertas, ahora en el Barça están dispuestos a escuchar una oferta superior a la que ya se ha insinuado. Si las cosas van por ese cauce, se podría negociar su marcha siempre que entre dentro de un tiempo prudencial para que el club tenga tiempo de encontrar soluciones en el mercado.

A priori, la propuesta debería llegar antes de las Navidades. El mercado chino no cierra hasta finales de febrero, pero el club sí que ha dejado muy claro al entorno del jugador de que no negociará nada una vez pasado el 1 de febrero. En el caso de que se vaya, quieren que sea lo más avanzado del mes de enero y que el argentino esté dispuesto a seguir jugando en el Barça en un mes que va a estar muy cargado de partidos por la Copa del Rey. La puerta está algo abierta, aunque habrá que ver cómo acaba toda esta historia.

Mascherano es algo más optimista. Cree que no le pueden cerrar la oportunidad de firmar el contrato de su vida y entiende que ya no es un futbolista indispensable para el Barça y que ya ha cumplido su ciclo. En el club le ven como pieza importante en defensa y en el vestuario y solo le darán salida si hay una compensación económica que no vaya en contra de los intereses de la entidad.