Problema Ansu en el Barça

El club entiende que pueda estar enfadado por no jugar, pero sabe su situación y ahora toca remar en este fin de curso. Luego se negociará su adiós

FC Barcelona - Young Boys | La entrada al terreno de juego de Ansu Fati

Ansu Fati volvió a vestir la elástica azulgrana en un partido de Champions / TELEFONICA

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

El partido ante el Celta dio para infinidad de imágenes. La mayoría de ellas de euforia tras la victoria, pero también algunas de enfado. Algún futbolista se quejó por los cambios y otros por no tener minutos. El más efusivo fue Ansu Fati, relegado al banquillo tras estar toda la segunda parte calentando. El canterano está ya muy cansado con su situación, pero desde el club tienen claro que ahora lo que toca es remar todos a una y esperan que éste sea solo un caso aislado.

Ansu esperaba ayudar contra el Celta, pero Flick prefirió dar paso primero a Lamine Yamal y Dani Olmo, que fueron decisivos. Y, luego, apostó por Pau Víctor, un futbolista que tiene prendado al cuerpo técnico y del que creen que merece muchos más minutos que los que ha tenido. De hecho, el delantero lo hizo todo bien desde que salió al terreno de juego.

Ansu Fati estalló al finalizar el partido mientras sus compañeros estaban celebrando un triunfo que puede dar una Liga. Tanto el cuerpo técnico como desde el club entienden la frustración pero aseguran que el futbolista tiene clarísima su situación desde el mes de enero y aceptó quedarse. En el Barça saben que es un tema delicado por el arraigo que tiene Ansu dentro del vestuario y por el cariño de la afición blaugrana, pero entienden que es el momento de caminar todos juntos en el objetivo del triplete.

Al entorno más cercano de Ansu no le ha gustado nada la gestión que se ha hecho con el futbolista esta temporada y apuntan a Flick y la dirección deportiva. Le dieron esperanzas en verano, comenzó a jugar minutos, pero algo se torció tras su última lesión y en el mes de enero le comunicaron que podía salir si así lo deseaba, cosa que no sucedió porque el canterano deseaba tener una última oportunidad.

Flick fue claro y ya en diciembre le dijo al jugador que tendría muy pocas oportunidades. Al entorno tampoco le ha gustado que señalara al futbolista públicamente dejando entrever que no se entrenaba bien cuando aseguran que lo está dando todo y que físicamente está en uno de sus mejores momentos en los últimos años.

La situación deportiva de Ansu para los responsables deportivos es irreversible. No cuentan con él para el futuro, pero no se va a hablar del tema hasta la finalización de la temporada. No se van a gastar energías ahora ya que lo único que importa son los objetivos deportivos, pero a partir de junio se volverán a poner las cartas encima de la mesa en una negociación que se intuye complicada.

El Barça está abierto a todos los escenarios y confían en la mano derecha de su agente, Jorge Mendes, que deberá poner calma en el asunto. La mejor opción para el club es una salida definitiva y puede haber mercados en los que, incluso, se consiga un traspaso, pero Ansu tendrá la última decisión y no parece nada claro que desee ir a Qatar, Arabia Saudí o Emiratos.

La otra opción es la carta de libertad, algo que hace unos meses hubiese sido factible, pero ahora no. Ansu tiene contrato hasta el 2027 y en todo caso se podría hablar de una rescisión en la que el club blaugrana debería abonar hasta el último céntimo. La última opción es una cesión, algo arriesgado tanto para el Barça -que debería pagar parte de la ficha- como para el jugador viendo la experiencia del Brighton.

Las dos partes esperan una tregua en la que Ansu, uno de los jugadores más queridos dentro del vestuario, deberá asumir que podrá jugar poco. Otra cosa es que el Barça consiga ganar la Liga antes de lo previsto y el canterano pueda mostrar todo su potencial en las últimas jornadas. También sería un escaparate para los muchos equipos que están pendientes de su situación.