La prisión de Soto del Real impide la visita de las peñas a Sandro Rosell

El mal trato juidicial a Sandro Rosell da un paso más en la incesante cadena de perjuicios contra un preso que,  once meses después de haber ingresado en prisión preventiva, todavía está pendiente de ir a juicio... y defenderse.

El ex presidente del Barcelona se encuentra en el módulo 10 del centro penitenciario de Soto del Real y en la jornada de hoy viernes debía recibir la visita de una representación de la Confederación Mundial de Penyes, después de la reunión que celebra

n en un hotel de Madrid donde han ido con motivo de la final de la Copa del Rey.

El centro penitenciario, sin embargo, ha denegado la petición de las peñas azulgranas que han visto como quedaba frustrado su deseo de reencontarse con Sandro.

Si cuando estaba en el módulo 4 tenía más flexibilidad para recibir visistas, hoy en el módulo 10 la realidad es mucho más estricta y solo diez personas (a parte de sus familiares directos) pueden visitar de forma regular a Sandro. Estas personas que figuran en la lista no son rotatorias por lo que son siempre los mismos los que van cada viernes (día de las visitas) a Soto del Real para estar 40 minutos (tiempo definido) con Rosell. Las visitas son a través de un vidrio y la conversación se desarrolla a través de un teléfono.

El único peñista que podrá cumplir con su deseo es Josep Maria Coronas, integrante de la confederación, dada su condición de abogado. El sí podrá estar con Sandro Rosell para hacer llegar todo el aliento del resto de los integrantes de la Federación de Peñas.

Mientras él está dentro del centro penitenciario, otros amigos esperarán fuera, como es el caso de Antoni Guil, presidente de la confederación o Pau Vilanova, directivo que va en calidad de amigo íntimo de Sandro Rosell.  

Se trata de un nuevo gesto de poca voluntad hacia un preso que todavía no ha podido defender su inocencia.