Prince Boateng, un sinsentido real

El fallo que resume el nefasto partido de Boateng

El fallo que resume el nefasto partido de Boateng / LALIGA

German Bona

German Bona

Un sinsentido. Así cabe calificar la cesión de Kevin Prince Boateng al FC Barcelona. Ni marca goles, ni vende camisetas, y lo más importante, sus minutos han sido tan escasos que apenas han permitido dar descanso a un Luis Suárez que ha acabado rompiéndose. El fracaso no ha tenido consecuencias económicas porque se pagó solo un millón de euros por la cesión al modesto Sassuolo, y lógicamente no se hará efectiva la opción de compra de ocho millones, pero en el aspecto deportivo no hay por donde cogerlo. 

El 'summum' del surrealismo llegó el pasado fin de semana, cuando con Luis Suárez ya de baja por una artroscopia, el alemán de origen ghanés ni siquiera fue convocado. En su lugar, Valverde optó por colocar a Leo Messi de falso '9' y darle después la alternativa en Primera División a Abel Ruiz. En apenas unos minutos, el valenciano dio un pase de tacón y creó más ilusión en la grada que la que podía generar un futbolista de 32 años con mil batallas detrás pero que apenas ha contado para el Txingurri.

Mal presagio en el debut

Y es que los números de Prince como azulgrana son paupérrimos. Solo 305 minutos repartidos en cuatro partidos. Tres de Liga y 1 de la Copa del Rey, competición en la que debutó el 23 de enero en la derrota en el Sánchez Pizjuán por 2-0. Mal presagio. Y eso que parecía que había prisa por verle en acción, solo hacía un día que había sido presentado y no tenía ficha, pero Del Cerro Grande hizo constar en el acta arbitral que disponía de una autorización de LaLiga. En los 63 minutos que jugó, destacó en el trabajo, pero solo remató una vez. Suárez le sustituyó cuando los hispalenses ya tenían ventaja de dos goles.

Después llegó la primera titularidad en la Liga, el 16 de febrero en el Camp Nou ante el Valladolid. De nuevo mucho trabajo, pero pleno desacierto ofensivo. Masip le amargó la tarde, sobre todo en un clarísimo uno contra uno, y apenas se entendió con Messi y Dembélé, sus compañeros arriba. Suárez pudo descansar una hora. El charrúa le sustituyó a los 59 minutos.

A partir de aquí, tuvo que esperar casi dos meses, y ya con la Liga en el bolsillo, para volver a jugar. Fue en Huesca, en la primera ocasión que completó los 90 minutos. El resultado lo dice todo: 0-0. Para Prince, más de los mismo. Buen trabajo de espaldas a los rivales, pero sin ninguna incidencia en el remate. Su última participación fue en Vigo. Un partido en el que el Barça, indolente y sin jugarse nada, apenas chutó a puerta. Desesperado (le enseñaron la amarilla tras tirarle el balón a Hugo Mallo), perdió muchos balones y cuajó seguramente su peor partido como blaugrana. Que ya es decir.

Sin alivio para Suárez

Boateng llegó al Barça para sustituir a Munir en el objetivo de darle descanso a Luis Suárez. El de San Lorenzo de El Escorial fue traspasado al Sevilla por solo un millón de euros, lo mismo que costó la cesión de Prince. No se entiende. Hasta su salida en el mercado de invierno, Munir jugó esta temporada 11 partidos y marcó 2 goles, dándole más respiro a Luis Suárez. Con los hispalenses, por cierto, ya lleva marcados 6 goles.

Misión que se había ejecutado bien la temporada pasada, cuando Munir marcó 14 goles en 37 partidos y Paco Alcácer firmó 7 dianas en 23 encuentros. Fuera el madrileño, el valenciano o también Sandro, siempre había habido un '9' de repuesto de garantías que diera respiro a Suárez y le deslibrara de toda la responsabilidad goleadora. Con Boateng, la planificación ha saltado por los aires.