El preocupante balance del Barça en los clásicos como local

Atención a navegantes. El FC Barcelona recibe este domingo al Real Madrid en un clásico que se postula como decisivo para el desenlace de la Liga. Con cuatro puntos de ventaja a favor de los blaugranas cuando restan sendas jornadas para que el campeonato liguero baje el telón... Hagan ustedes mismos las cuentas. Una victoria de los catalanes les dejaría el título, prácticamente, en sus vitrinas; mientras que una derrota avivaría el desenlace a unos niveles altísimos.

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Hansi Flick parece tenerle tomada la medida al Real Madrid: cuatro partidos contra los blancos esta temporada y cuatro victorias. 1-2 en el amistoso de pretemporada en Nueva York, 0-4 en el clásico liguero en el Santiago Bernabéu, 2-5 en la final de la Supercopa de España en Arabia Saudí y 2-3 en la final de la Copa en La Cartuja. Por lo tanto, el de este fin de semana será el primer clásico que se disputará en Barcelona.

Es aquí cuando, si tiramos de hemeroteca, vemos que en la época reciente, al Barça no se le ha dado especialmente bien recibir al cuadro blanco en su casa: tanto en el Spotify Camp Nou como en el Estadi Olímpic Lluís Companys de Montjuïc. Unos precedentes que, a pesar del gran momento de forma de los culés en los clásicos, les tiene que servir de advertencia para no bajar la guardia.

De los últimos cinco partidos que el Barcelona ha disputado contra el Madrid en la capital catalana, tan solo han ganado uno y han perdido los otros cuatro. Si ampliamos el foco a los últimos diez clásicos, el balance para los culés es de dos triunfos, tres empates y cinco derrotas. Estas dos victorias se produjeron en la temporada 2022/23 con el tanto de Kessié sobre la bocina que supuso el 2-1 definitivo y en el curso 2018/19 con una manita por 5-1 al entonces equipo entrenado por Julen Lopetegui, que le costó la destitución al día siguiente.

Entre las derrotas más recientes en la capital catalana, encontramos un 0-4 en la vuelta de las semifinales de la Copa 2022/23 o el bochornoso 1-3 en la vuelta de la Supercopa de España 2017/18, aquella noche en la que el Camp Nou se vistió de blanco y celebró los goles del Madrid. Flick deberá romper esta preocupante racha para amarrar el título de Liga.