La Premier, pendiente del futuro de Adama

Todo se mueve en el Barça, inmerso en plena competición, con LaLiga en juego y la Europa League como horizonte para acabar la temporada con un título continental. Eso en lo que al fútbol se refiere, pero también en los despachos la actividad también hierve.

La planificación de la próxima temporada está en marcha y son muchos los nombres cuyo futuro hay que solucionar en las próximas semanas. Uno de ellos, el de Adama Traoré, que llegó durante el pasado mercado de invierno al Camp Nou y cuyo rendimiento ha demostrado que la operación ha sido un acierto. De hecho, el jugador hizo un esfuerzo para volver a casa y, según algunas informaciones, el club se comprometió a seguir contando con él a largo plazo.

El precio, un problema

Sin embargo, el de L’Hospitalet está cedido por el Wolverhampton y la opción de compra que tiene el Barça para hacerse con el extremo en propiedad está cifrada en 30 millones de euros. El Barça no está en condiciones de satisfacer dicha cantidad, por lo que el futuro de Adama, salvo cambio de planes poco probable, pasa, de nuevo, por la Premier League. De hecho, en Inglaterra están muy atentos al canterano culé.

Quien más lo está, obviamente, son los Wolves, que, a su vez, disfrutan de la presencia de Francisco Trincao, cedido por el Barça y cuyo préstamo también contempla una opción de compra por una cifra cercana a los 30 millones de euros.

Mientras Wolverhampton, Jorge Mendes, que tiene un enorme control de la operaciones del conjunto inglés y es agente de los dos futbolistas, y el Barça intentan llegar a un acuerdo, otros clubs están al acecho. Uno de ellos es el Tottenham, que lleva tiempo detrás de Adama, un jugador que ya ha demostrado de lo que es capaz en la Premier, pero que también está exhibiendo un gran nivel en LaLiga tras su regreso al Camp Nou. Todo está por hacer y todo es posible, pero son muchas las operaciones entrelazadas que pueden provocar movimientos en un sentido u otro. Adama podría incluso seguir en el Barça, pero su continuidad está pendiente de cómo van cayendo todas las piezas.