¿Por qué Arturo Vidal no tiene los minutos que él esperaba?

Nil Congost

Arturo Vidal, o el King, como se hace llamar, viene siendo noticia los últimos días después de haber incendiado las redes sociales tras dejar bien claro en su perfil de Instagram que después de haber incendiado las redes socialesse siente decepcionadoA continuación analizamos, desde un plano puramente futbolístico, la razón por la que Vidal no tiene los minutos que se esperaba cuando vino a Can Barça.

Sus minutos disputados van a menos desde años atrás. En su primer año en el Bayern, después de haber hecho  buenas campañas con la Juventus, fue uno de los jugadores importantes para Pep Guardiola en su último año como técnico de los bávaros. Guardiola, sobre Vidal, decía que era “un chico muy fuerte”, y que “lo que lo diferencia de los demás es su cabeza, su mentalidad. Un jugador con mucha llegada, con mucho trabajo y con un muy buen pie, mejor de lo que se piensan”.  Por aquel entonces, Guardiola usaba a Vidal en la medular juntándolo, normalmente, con Thiago Alcántara. Dos perfiles opuestos que se equilibraban el uno al otro haciendo un tándem que sin duda le dio buenos resultados al técnico catalán.

A medida que avanzaba la temporada, no obstante, el chileno fue avanzando su posición cada vez más: “Me gustaría que Arturo jugara un poco más por delante porque algunos partidos con rivales cerrados no hace gol quien está sino el que aparece, el que llega. Arturo entre líneas no es muy, muy rápido y si no hay espacios entre líneas necesitas habilidad en el espacio corto, y él no la tiene. Lo que buscamos de él es esa capacidad para llegar desde atrás y en el juego aéreo”, dijo el propio Guardiola sobre Vidal.  Aquel año acabaría disputando 2.048 minutos.

Con Ancelotti y Heynckes, en las próximas dos temporadas, el rol de Vidal fue parecido a su final de temporada con Guardiola. Arturo Vidal pasó a jugar, muchas veces, en la posición de media punta en un 4-2-3-1 o un 4-1-4-1. Las dificultades para jugar a espacios cortos hacían que tuviera que ceder esas zonas de influencia a jugadores con mejor trato de pelota. Además, en aquellas posiciones más adelantadas se podía aprovechar mejor su gran golpeo.

Vidal seguiría bajando su registro de minutos por temporada. 1823 minutos disputados en la Bundesliga en el segundo año, y 1.457 minutos en el tercero

Con estos problemas y también estas virtudes vino Vidal al Barça para reemplazar a Paulinho, con la idea infundada que el Barça necesita de un perfil como el del brasileño.

Barça y Bayern son equipos que se caracterizan por querer dominar al rival mediante la posesión de la pelota en el llamado juego de posición, o juego de ubicación. La gran diferencia entre ambos es que el Bayern no tiene a Messi, quien para Arturo Vidal es el mejor jugador del mundo tal como él mismo dijo en unas declaraciones cuando aún estaba en el club bávaro. 

Cuando los equipos juegan contra Messi hacen todo lo posible para reducirle el tiempo para pensar intentando hacer los espacios lo más pequeños posibles. Eso conlleva que la zona de influencia del centro del campo esté hiperocupada haciendo muy difícil la consecución de relaciones en espacios tan pequeños. Como dijo Guardiola: "A Vidal no se le dan bien esos espacios", por lo que no puede desarrollar el rol usual de interior del Barça.

Partiendo de esta premisa, a Arturo Vidal le quedan aquellos momentos en los que el Barça sea capaz de, mediante apoyos de fijación y atracción, consiga desocupar el área para que jugadores de segunda línea puedan atacarla como vino haciendo el brasileño el año pasado y que le acabó dando buenos resultados al Barça.

El otro cometido de Vidal es el que responde a su apodo, el KingEl jugador chileno, con unas condiciones físicas excelentes, es un jugador capaz de abarcar mucho espacio y, por lo tanto,  un comodín para equilibrar las posibles pérdidas o para conseguir ayudas defensivas con más frecuencia cuando el Barça sufra por algún flanco.

Lo que parece estar claro es que las condiciones físicas de Vidal no responden a las exigencias técnicotácticas del juego del Barça en fase de posesión, por lo que el chileno tendrá que aceptar su rol secundario entrando, normalmente, desde el banquillo cuando los equipos rivales estén más cansados y no lleguen con tanta facilidad a cerrar los espacios. Ahí, Vidal seguramente podrá ser un jugador importante para Valverde tal como lo fue para Guardiola.