¿Por qué Umtiti ha conquistado el Camp Nou?

"Soy un gran currante y el fútbol es competencia. Me inspiran los centrales que son constantes". Cuando Samuel Umtiti fue presentado en el Barça lo hizo rodeado de cierto esceticismo, pero de sus palabras se intuía un tipo ambicioso y convencido de sus posibilidades.

“Los centrales en el Barcelona han de ser especiales, viven de manera muy especial, tienen mucho margen de campo que defender, no han de marcar goles, pero han de empezar a generarlos. El central en el Barcelona vive aislado, lejos del compañero y ha de ser especial", recordó Robert Fernández. 

Ser defensa en el Barça es uno de los oficios más complicados del mundo del fútbol. Y además Umtiti luchaba con la leyenda negra que acompaña a los centrales que llegan de fuera desde hace más de una década.

No era, además, un futbolista consolidado en la élite y muchos se acordaron de algunos precedentes como sus compatriotas Déhu o Christanval. Algunos veían su fichaje como un experimento tras descartarse la llegada de futbolistas con más nombre. 

Umtiti no tardó en dejar buenas sensaciones. Y en el vestuario del Barça pronto descubrieron que detrás de esa apariencia de buenismo se escondía un competidor feroz.

"No es de darle muchas vueltas a las cosas. Coge las cosas como le vienen y da el cien por cien. Tiene una mentalidad de soldado, de hacer las cosas que se le dicen”, asegura el corresponsal de L’Equipe, Florent Torchut.

Big Sam, como le bautizó Evra, se ha convertido en un fijo del Barça y está convencido de que es uno de los mejores del mundo en su posición. Esa seguridad en sus posibilidades y la gestión de los errores (asegura que ha aprendido a pasar página con rapidez) han contribuido a formar junto a Piqué una de las mejores parejas del mundo.

Esa sensación de jugador de equipo y carácter risueño han contribuido a que el futbolista conectara con la afición. Umtiti tiene un carisma discreto y una gran ética de trabajo que le viene de su madre.

"He llegado donde quería gracias a su apoyo. Para ella lo más importante eran los estudios y después el fútbol. Si no hacía los deberes, no me dejaba ir a los entrenamientos, así que me esforzaba con los estudios para poder ir a jugar con mis amigos. El rigor de mi madre me ayudó mucho en este sentido", recordaba en una entrevista para el club el pasado mes de julio.

Ahora el central le da vueltas sobre su futuro, convencido como está de que es uno de los centrales con mejor cartel de Europa.