¿Por qué el 'caso Suárez' vuelve a estar bloqueado?

Suárez fue el único goleador azulgrana de la noche, aunque no sirvió de nada

Suárez fue el único goleador azulgrana de la noche, aunque no sirvió de nada / MEDIAPRO

Jordi Gil

Jordi Gil

La posible salida de Luis Suárez del FC Barcelona sigue enquistada y va camino de no resolverse en algún sentido hasta los últimos días del mercado, cuyo cierre está fijado para el 5 de octubre. La última vuelta de tuerca ha llegado con la insistencia del club en pedir un traspaso a los equipos que desean ficharle, una condición muy difícil de salvar ya que sus pretendientes lo esperan con la carta de libertad.

Suárez ha movido ficha porque, como ha insistido en más de una ocasión, no quiere ser un problema para el FC Barcelona. El uruguayo ha escuchado propuestas y ha planteado al club vías de escape. Sin embargo, el Barça quiere obtener alguna compensación económica por su marcha. La entidad barcelonista necesita ingresos urgentes y el uruguayo es un futbolista con mucho caché, que tiene un valor importante en el mercado.

Dificultades

El problema radica en que Suárez no ha pedido su salida, sino que ha sido el FC Barcelona el que le ha empujado a marcharse. Pidiendo un traspaso, el club obstaculiza su propio deseo de desprenderse del jugador. En caso de concederle la carta de libertad y pactar una compensación por el año que le resta de contrato, Suárez probablemente ya estaría fuera del Barça y se habría finiquitado el caso.

El FC Barcelona se ha enrocado y el jugador tampoco da su brazo a torcer en defensa de un contrato que él no quería romper. Su deseo era continuar vistiendo de azulgrana una temporada más y seguir haciendo historia tras convertirse en el tercer máximo goleador de todos los tiempos.

La Juventus

Las posturas son dispares, pero seguirán las conversaciones. Un handicap añadido es la lentitud en el proceso burocrático para obtener el pasaporte italiano. La Juventus, con la que el Barça tiene una excelente relación, podía haber alcanzado algún tipo de acuerdo con la entidad barcelonista, pero no fichará al uruguayo mientras no pueda jugar en su competición como comunitario. La Juve se está volcando ahora en cerrar el fichaje de Edin Dzeko, de la Roma.

Suárez, por su parte, continuará entrenando a las órdenes de Koeman y cumpliendo a rajatabla con sus compromisos profesionales. De llegar a la fecha límite del mercado y no cerrarse la salida, el técnico del Barça ya anunció que contaría con Luis Suárez como un jugador más de la plantilla. Un escenario que, por ahora, aún queda lejano con dos semanas de margen para inscribir a jugadores.