La plantilla del Barça ya no oculta su malestar

Griezmann: "Veníamos a ganar pero no pudo ser"

 El francés atendió a los micrófonos de Movistar tras el encuentro para valorar el partido ante el Nápoles / MOVISTAR

Juan Manuel Díaz

Juan Manuel Díaz

Los acontecimientos extradeportivos de las últimas semanas, combinados con la confirmación de que la plantilla llega al momento decisivo de la temporada justa de fuerzas y de recursos, han hecho que varios de sus pesos pesados hayan expresado abiertamente su malestar. Leo Messi fue el primero y a continuación aparecieron Gerard Piqué en la previa del choque de Nápoles y después Sergio Busquets e Ivan Rakitic en el postpartido.

De la misma manera que los resultados más o menos buenos, como en 1-1 del San Paolo contra el Nápoles, ya no esconden la falta de juego o de pulmones en muchas fases de los partidos, las convocatorias también dejan en evidencia la mala planificación. Quique Setién dispone de dieciséis fichas del primer equipo -incluyendo al segundo portero Neto, al tocado <strong>Gerard Piqué </strong>y al reclutado de última hora, Martin Braithwaite-, además de Ansu Fati, de cara al trascendental choque del Santiago Bernabéu. 

nadie se guarda nada

A estas alturas parece que nadie en el vestuario blaugrana está dispuesto a guardarse nada dentro, al margen del propio Setién que intenta disfrutar de una oportunidad única en su carrera deportiva. ¿Actitud en los entrenamientos? ¿Métodos cuestionables por parte del antiguo técnico? Perfecto. ¿Y el diseño de la plantilla? ¿Y las decisiones en el capítulo de altas, bajas y cesiones no ya en el mercado de verano, sino en el del invierno...?

Así, Sergio Busquets, elegido mejor jugador del Nápoles-Barça, envió su mensaje por partida doble. "Sabíamos que corríamos esa manera de afrontar la vuelta. Hemos tenido la expulsión de Arturo, lo de Piqué ojalá no sea nada. Afrontarlos con lo que somos, somos una plantilla corta, desgraciadamente la planificación ha sido así", fue la primera carga de profundidad de Busi.

El mediocentro blaugrana cuestionó la planificación deportiva de nuevo cuando le preguntaron por la falta de profundidad y remate mostradas por el equipo. "Somos una plantilla corta, no tenemos jugadores de ese perfil (de banda) para atacar, tenemos que reinventarnos. Nos gusta jugar por dentro”. La salida de Carles Pérez o la lesión de Ousmane Dembélé son dos ejemplos.

Ivan Rakitic, uno de los futbolistas que más está sufriendo en esta irregular temporada -fue postergado primero y recuperado después pero no ha conseguido aún ofrecer su mejor nivel- tampoco se ahorró una opinión al respecto. "Los responsables ya sabían que la plantilla era cortaLa solución es la que es. Los que estamos vamos a juntar nuestras fuerzas porque tenemos un partido muy importante en la vuelta".

La reacción de estos dos veteranos que durante años fueron los gestores de la sala de máquinas blaugrana, cuestionando directamente los aspectos técnicos de la gestión deportiva, se une a la crítica de <strong>Piqué</strong> al entorno que rodea al club y a la plantilla: "Putxinel·lis hay en todas partes".

O a las palabras de Messi en las últimas semanas pidiendo respeto, desmintiendo que él y sus compañeros decidan la línea deportiva y quién debe ser el gestor del banquillo, y mordiéndose la lengua ante las salpicaduras del 'Barçagate': "La verdad que yo lo veo raro que pase una cosa así". Por no hablar de su demoledor: “Hoy no os alcanza para ganar la Champions” en referencia al potencial de la plantilla. 

Y el domingo, el clásico del Bernabéu...