El plan del PSG para fichar a Luis Suárez

El PSG está meditando la estrategia para lanzar la ofensiva para intentar el fichaje de Luis Suárez. La cúpula directiva parisina ha recibido la petición de Neymar Junior para que aborde la llegada del uruguayo, tal y como adelantó SPORT, y ahora está trazando las líneas maestras del plan que seguirá para que el crack brasileño tenga a su lado al futbolista que ha solicitado.

El director deportivo del PSG, Antero Henrique, es el responsable de liderar esta operación. Para empezar, el primer paso es solucionar la situación de Cavani. Neymar no lo quiere a su lado y el propio Cavani está por la labor de marcharse.

El PSG necesita vender a su actual delantero centro para que Ney esté satisfecho y, al mismo tiempo, cumplir con el ‘fair play’ financiero. El PSG sabe que la cotización de Suárez es unos 20 millones de euros superior a la de Cavani, por lo que al dinero obteindo deberá sumar esta cantidad para presentar una oferta al FC Barcelona.

Contactos difíciles

En caso de concretar la venta de Cavani, el PSG deberá dar un paso que no le resultará nada agradable, como es contactar con el Barça. Las relaciones entre los dos clubs están muy deterioradas. El detonante final fue la marcha de Neymar, pero antes ya hubo fricciones entre ambas entidades. El PSG nunca aceptó de buen grado el interés del Barça por jugadores como Thiago Silva, Marquinhos o Verratti. Su réplica llegó llevándose a Neymar y, posteriormente, negándose a vender a Di Maria cuando el club blaugrana lo quiso incorporar a la desesperada en el último mercado de verano.

A todo ello hay que añadir el mar de fondo por el patrocinio de Catar, con la estrecha vinculación con el PSG, y la ruptura con el Barça, que tiene actualmente el acuerdo comercial con la firma japonesa Rakuten.

Por tanto, los franceses deberán realizar un acercamiento difícil y se van a encontrar un Barça reacio a cualquier operación. Luis Suárez tiene una cláusula de rescisión de 200 millones de euros, si bien el PSG tratará de rebajarla de forma notable. La tensión está asegurada y queda por ver hasta qué punto el club parisino pondrá toda la carne en el asador.