Tres debuts ilusionantes

Hay que analizar los partidos más allá del resultado, incluso más allá de lo que cada jugador haya ofrecido sobre el césped. Dest, Pedri y Trincao jugaron su primero Clásico y hay motivos para ilusionarse.

Pedri arrancó en la banda derecha, posición que, normalmente, es la de un extremo. El canario no lo es y sufrió. Lo hizo a su manera, que es jugando a fútbol. Y de eso le sobra. Luego intentó marcharse al centro y allí encontró más su sitio, pero es evidente que Pedri no se sintió del todo cómodo para ejercer la influencia que su calidad debería ejercer en un equipo como el blaugrana. Ejecutó jugadas precisas que evidenciaron el momento dulce por el que atraviesa, pero lo hizo sin continuidad. No pasa nada. El futbolista tiene fútbol para regalar y cumplió en su primer Clásico. Una gran noticia para el barcelonismo.

Dest jugó, por fin, en la banda derecha como titular. Lo hizo en un partido importante y dio la sensación de sentirse mucho más cómodo de lo que lo había hecho previamente en otros encuentros, cuando su posición estaba en la izquierda. Apretó, entró, defendió y puso intensidad y velocidad. Es joven y todo lo que puede hacer es mejorar, pero hay materia prima para hacerlo. El futuro es suyo.

Seguramente era un partido para que su desborde llegara desde el inicio. Cuando salió, con un resultado desfavorable, le costó. Habrá más oportunidades para ser importante.