El país de los conductores perdidos

La rueda de prensa de Valverde se ha pospuesto

La rueda de prensa de Valverde se ha pospuesto / EFE

Albert Masnou

Albert Masnou

En menos de 24 horas, la Supercopa de España ha vivido tres situaciones idénticas que ha puesto en jaque a los organizadores del torneo por culpa de los conductores árabes.

Tres situaciones idénticas que ha hecho perder los nervios a más de uno. Las dos primeras afectaron a los medios de comunicación pero la tercera la sufrió el propio Ernesto Valverde y Sergio Busquets.

Ambos tenían que ser los protagonistas de la rueda de prensa previa a la semifinal antes del Valencia, una conferencia que debía celebrarse en las instalaciones del Al Itihhad.

Ambos salieron antes que el resto del equipo destino al campo de entrenamiento pero el conductor se perdió y llegaron una hora después de haber salido del hotel, sin tiempo para celebrar la rueda de prensa en la hora prevista porque estaba a punto de iniciar el entrenamiento. Técnico y jugador llegaron sobre la campana.

Valverde y Busquets se fueron a entrenar y está previsto que después de la sesión preparatoria solo el técnico atienda a los medios. Esto provocó un caos organizativo entre la organización que tenían escalonado un plan para la prensa para ir a la del del Barça, la del Atlético y al partido entre el Madrid y el Valencia.

El segundo incidente fue para los medios de comunicación que el martes querían ir a la rueda de prensa del Valencia. El conductor del autobús llevó a los periodistas hasta el estadio King Abdullah en vez del estadio de entrenamiento del Al Alhy, escenario de la sesión preparatoria del Valencia. Total, una hora perdida.

El primer incidente también fue sufrido por los periodistas, alojados en el Blu Radisson. El navegador llevó a este bus hasta uno de los tres hoteles con este nombre en Yeda pero no el que tenían la reserva el paquete de la Federación. Total, un trayecto de 20 minutos acabó siendo de una hora y diez.

La  Federación Española sufre como la propia delegación española que ha viajado hasta Yeda porque los autobuses y los conductores los pone la organización saudí, conductores que no son ni nacionales ni conocen la ciudad.