La entrevista

Óscar Nebreda: "En el palco del Camp Nou se daban bastonazos para comer canapés"

Óscar Nebreda (Barcelona, 1945) fue durante un cuarto de siglo cronista de la actualidad del Barça a través de sus viñetas en 'El Periódico'. Jubilado desde hace dos años, el dibujante catalán nos cuenta sus vivencias y su punto de vista sobre la actualidad en SPORT

Ricard López

Óscar es historia viva del cómic español. En plena dictadura franquista fue uno de los creadores de publicaciones satíricas como 'El Papus' -cuya sede fue objeto de un atentado con bomba de la banda fascista 'Triple A', en 1977-, y también del deportivo 'Barrabás'. Ese mismo año fundó 'El Jueves', revista que continúa siendo un referente del humor en nuestro país.

'Padre' de personajes como 'El Profesor Cojonciano' o el célebre 'Jordi Culé', Óscar no añora dibujar. Aunque admite que lo que ocurre hoy en el mundo le daría para mucho: "En 50 años dibujando había visto muchos follones, pero tantos como ahora, no. Con la que está cayendo me acuerdo de aquellas dos bestias pardas, que eran el Ivà y el Perich, y pienso qué harían si no estuvieran muertos. Sus dibujos ahora serían gloria bendita", dice, recordando a dos de sus amigos y compañeros de profesión.

"En épocas de penuria económica, mental y de valores, como la de ahora, hay que luchar. Yo cuando más a gusto estaba en mi oficio era con Franco, porque luchábamos contra una dictadura y a aquellos cabrones, a los fachas aquellos, había que pasarles por encima hasta hundirlos en la mar, era lo que te movía".

Óscar echa en falta más "brillantez y talento" en el panorama humorístico actual. "Ya no me sorprende nada. Hay cosas que están bien, divertidas, pero no es como hace 20 años. Falta más mala hostia y crítica contra el poder, o contra el Madrid o el Barça, que no hay nada sagrado. No sé a qué es debido, si a la mala alimentación, al cambio climático, o a que la gente está más por las tonterías del móvil, pero no veo en las nuevas generaciones alguien que coja el hacha", lamenta.

Uno de los males de su oficio es, a su juicio, el intrusismo: "Hoy en día cualquier 'pelao' se cree humorista. Y a alguno me gustaría decirle: 'dedícate a otra cosa, a sexar pollos, a hacer la circuncisión de los piojos, pero no te pongas a trabajar de lo que no sabes'".

Y otra parte de su desaliento se debe a los gustos de buena parte de la población: "Si en este país, 5 millones de personas se dedican a ver cómo el Falete se tira a una piscina y eso es trending topic, o hashtag o como se llame, o la hostia en barca, pues empiezo a pensar que me tengo que borrar".

Tampoco le gusta el clima de enfrentamiento que se vive en todos los ámbitos, desde el político hasta el deportivo: "Yo, de toda la vida, cuando me encuentro con un tío del Madrid hacemos coñas, que si os han regalado las Copas de Europa, que si esto, que si lo otro. Siempre se podían hacer esas bromas; ahora, no. Y a nivel de identidades, lo mismo. Ahora, si no eres catalanista eres un españolista; y si eres españolista te tienes que cagar en los catalanes, y dices, 'hostia, tío, ¿pero esto qué es?'".

En el vídeo que adjuntamos, Óscar rememora varias de las anécdotas que vivió en su época como 'ninotaire' (historietista) de la actualidad del Barça. Entre ellas, los "bastonazos" que presenció entre "primeras fortunas de Barcelona para comerse un canapé en el palco del Camp Nou". "Allí no sentía los colores nadie. El Sobrequés, y yo, y alguno más. ¿Pero culés, culés?, ¡los cojones de Buda!”.

"A mí ahora me gustaría que alguien hiciera historias y explicara cosas de Mourinho, sobre su juventud, por qué empezó a jugar, por ejemplo. Karanka es un personaje que sale ahí en medio, no sabe qué decir o qué hacer, y es una cosa amorfa. Nadie hace una coñeta sobre este tío. Sus pensamientos tienen que ser... Y esta obsesión que tiene Mourinho con el Barça. Le preguntan: '¿qué tiempo hace?', y el tío dice: 'en Barcelona llueve'".

En su opinión, de la crítica no debería librarse nadie. "A Guardiola se le podían dar palos por su forma de ser. Ya era raro cuando yo dibujaba. Era de los pocos que sabían leer y escribir en el mundo del fútbol. Ya como entrenador se podía hacer la coña por su look, porque una semana iba con pelo y sin barba, o al revés. Es como aquél del Milan el otro día, que tenía el pelo así (Al Shaarawy). Tiene coña. ¿Por qué se pela de esa manera?. Si yo soy tía y lo veo, pienso que ahí dentro (en la cabeza) no debe estar la cosa muy fina".

Óscar disfruta hoy del Barça desde la distancia. Gracias a su retiro, puede dedicarse a todo aquello para lo que le faltaba tiempo cuando trabajaba: "Paseo, viajo, salgo en barca a pescar por la Costa Brava, leo, voy al cine, al teatro. Dibujar fue una época de mi vida. Ya lo hice, y ahora le toca hacerlo a otros, a la gente joven"