Objetivo ante el Lyon: cerrar la puerta del Camp Nou

El Barça se juega este miércoles su continuidad en la Champions League ante el Olympique Lyon. El 0-0 de la ida eleva la importancia de mantener la portería a cero, ya que un gol francés obligaría al conjunto blaugrana a anotar dos dianas para alcanzar los cuartos de final. Y esa, precisamente, es la única asignatura pendiente que tiene por aprobar esta temporada el equipo que dirige Ernesto Valverde.

Líder con siete puntos de distancia en la Liga Santander, finalista de la Copa del Rey, después de dejar en la cuneta al Real Madrid en el mismísimo Santiago Bernabéu, y con una perspectiva en la Champions League que invita al optimismo, el único pero que se le puede encontrar al Barça es la facilidad con la que encaja goles en el Estadi, un hándicap que se ha hecho especialmente visible en la Liga Santander.

El conjunto blaugrana ha recibido en el torneo de la regularidad 16 dianas en 14 partidos, lo que da una media de 1.14 goles por encuentro. Y solo ha sido capaz de mantener su portería a cero en cinco ocasiones.

Los números no dejan margen a la discusión. En sus dos primeras campañas como propietario de la portería del Barça -las dos anteriores-, Marc Ter Stegen encajó nueve y seis goles, respectivamente. Es decir, en dos temporadas completas recibió ante su afición un gol menos que los que ya lleva este curso.

Ter Stegen encajó un gol menos sumando sus dos últimas temporadas

Es paradójico que el Barça se haya mostrado más seguro a domicilio que jugando en su feudo. Como visitante solo ha encajado 10 goles en 13 partidos y ha sido capaz de dejar su portería inmaculada en seis de esos encuentros.

De hecho, solo en cuatro temporadas, de los 90 años de historia que tiene la Liga, el conjunto blaugrana recibió más goles a estas alturas del torneo. La más cercana en el tiempo es la campaña 1998-1999. Hace 20 años.

El equipo dirigido por Louis van Gaal, que cumplía su primera etapa en el banquillo del Camp Nou, llevaba encajados 19 goles en el Estadi. Como ahora, el Barça lideraba la clasificación y esta estadística no impidió que levantara el título.

La campaña 1951-1952, con Fernando Daucik al frente, el Barça también lideraba la clasificación y también acabó proclamándose campeón. Entonces, la cifra de goles recibidos en casa eran 17.

El peor registro se produjo la temporada 1960-1961: 21 en 13 partidos

El peor registro de la historia del club se produjo la temporada 1960-61: 21 goles encajados en un partido menos, trece. El equipo era tercero y a pesar de que Ljubissa Brocic fue relevado por Enrique Orizaola, no logró mejorar esa posición.

El último curso con peor registro que el actual fue el 1987-1988, el último de Terry Venables en el banquillo blaugrana. El Barça llevaba encajado entonces 19 goles y estaba hundido en la novena plaza de la clasificación.

Luis Aragonés tomó el relevo del inglés, pero no logró meter al equipo en Europa a través de la Liga, que concluyó en séptima posición. El Barça, único club que siempre ha jugado un torneo continental desde su creación, encontró la tabla de salvación en la Copa del Rey, accediendo a la extinta Recopa tras ganar a la Real Sociedad en la final (1-0).

Un problema que no existe en la Champions League

Un dato para aumentar el optimismo de cara a la inminente visita del Olympique Lyon es que el Barça no ha exhibido en la Champions League la fragilidad defensiva de la Liga Santander.

En toda la fase de grupos, el conjunto blaugrana solo recibió un gol y con la clasificación y la primera plaza ya selladas. Fue  contra el Tottenham, que se jugaba su presencia en los cruces. Lucas Moura igualó a cinco minutos para el final el gol inicial de Ousmane Dembélé.

Antes, el Barça había dado buena cuenta del PSV Eindhoven (4-0) y del Inter de Milán (2-0), cerrando la fase de grupos con una media de 0,33 goles encajados por partido.

También en la Copa del Rey el Barça ha elevado sus prestaciones defensivas, lo que le ha permitido levantar eliminatorias complicadas como contra el Levante, que viajó al Camp Nou con una ventaja de 2-1, o el Sevilla, que lo hizo con un 2-0.

El equipo blaugrana solo ha encajado tres tantos como local en este torneo, contra la Cultural Leonesa (4-1), el Sevilla (6-1) y el Real Madrid (1-1), lo que supone una media de 0,75 por encuentro. Frente al Levante (3-0) logró mantener su portería a cero.