La negociación de la rebaja salarial 'solo' afecta a la mitad de la plantilla

Días muy convulsos los que se están viviendo en el Fútbol Club Barcelona. Con la moción de censura a la vuelta de la esquina, el presidente Josep Maria Bartomeu está liderando una negociación con la plantilla del primer equipo para ejecutar una rebaja salarial provocada por la pandemia del coronavirus.

Desde el club se está trabajando intensamente para que los jugadores puedan readaptar sus contratos a las circunstancias del momento y en algunos casos la negociación ha llegado a buen puerto. Tras golear al Ferencvaros, el club azulgrana anunció las renovaciones de <strong>Gerard Piqué</strong>, <strong>Frenkie De Jong, Clément Lenglet y Ter Stegen</strong>. Ambos ampliaban su relación con el FC Barcelona y se ajustaban el sueldo a lo que el club les había solicitado, una rebaja del 30%. En el caso de Gerard Piqué, la rebaja habría sido del 50%. Según fuentes del club, el central azulgrana se mostró muy predispuesto a ayudar al club en un momento tan delicado y no dudó en rebajar la mitad de su sueldo.

A estos cuatro cabe sumarle otros jugadores que anteriormente ya lo habían hecho. Es el caso de los recién llegados Dest y Pjanic, que en sus nuevos contratos ya venía incorporada. También Trincao y Pedri que, a pesar de pactar un contrato en enero cuando se les firmó, aceptaron la rebaja a su llegada a Barcelona. Riqui Puig, Araujo y Ansu Fati lo hicieron al firmar la ficha de jugador del primer equipo. Matheus Fernandes también. Por último, el cuerpo técnico de Koeman negoció su llegada al banquillo con estas condiciones.

Con todos ellos adaptados, en el club azulgrana aún tienen varias carpetas abiertas. Algunas como la de Griezmann se estuvo negociando hasta última hora pero no se llegó a un acuerdo. Tampoco con Busquets y Sergi Roberto, que siguen con el mismo contrato igual que Neto, Umtiti, Jordi Alba, Aleñá, Coutinho, Junior, Braithwaite, Dembélé y Leo Messi.

Desde el club cuentan que tuvieron el gesto de negociarlo de forma individual con cada jugador pero ahora ya se ha agotado el tiempo. Por ello, todos deberían acatar lo que se diga en la mesa de negociación que ya está escuchando a todas las partes.