Nadie corre más que el Barça de Flick

El Barça de Flick sabe sufrir, y sabe ganar sufriendo. Los azulgranas se quedaron sin Pau Cubarsí en el minuto 21 tras la expulsión del canterano, por tanto, jugaron con un jugador menos durante más de 70 minutos ante un equipo muy físico como el Benfica. Aun así, se llevaron una pequeña ventaja para la vuelta en Montjuïc.

Raphinha y Szczesny encienden la luz en el infierno de Lisboa

Una de las claves de la hazaña culé fue el físico de los jugadores de Flick. Entre todos los jugadores el Barça corrió 112,4km durante los 90 minutos, seis kilómetros menos que los locales pero con una puntualización: el Benfica eran 11 jugadores, uno más.

Si calculamos la distancia recorrida por futbolista contando que el Barça jugó con 10, nos sale un promedio de 11,24km cada jugador, en cambio, los portugueses corrieron 10,81km. Más de 400 metros por cada uno.

El Madrid corrió menos con uno más

Si comparamos los datos del Barça con los otros equipos en los octavos de final nos encontramos con que ningún equipo corrió más que los de Flick. De hecho, los azulgranas tiene mejores números globales que el Real Madrid (105km), Bayer Leverkusen (110km) o Brujas (110km). En defensa del equipo de Xabi Alonso, también jugaron una gran parte del encuentro con un jugador menos por la expulsión de Mukiele en el minuto 62.

Los tres equipos que se desgastaron más fueron el Borussia Dortmund (121km), el Arsenal (121km) y el Lille (120km). Si sacamos los promedios nos sale una media de 11 por futbolista, más o menos similar a los datos del FC Barcelona. El resto quedarían por detrás de los culés en este aspecto.

Y es que la victoria azulgrana no se explica sin el esfuerzo colectivo del equipo, así lo explicó Pedri tras el partido: "Creo que cuando nos quedamos con diez sabíamos lo que teníamos que hacer: defender como un bloque y esperar alguna jugada de los de arriba como Lamine o Raphinha". Y así lo hicieron, aguantando los envites del Benfica y saliendo rápido al ataque con los extremos, como se vió en el gol de Raphinha que da la ventaja a los azulgranas para el partido de vuelta.