Murillo, para solucionar el problema central del eje defensivo del Barça

La llegada de Jeison Murillo al FC Barcelona permitirá recomponer a Ernesto Valverde la nómina de centrales tras los problemas de lesiones que han penalizado a la plantilla hasta ahora. Consolidado el tándem Piqué-Lenglet, el colombiano Murillo será su alternativa mientras sigan de baja Umtiti y Vermaelen. 

Cuando el FC Barcelona cerró el pasado verano las salidas de Yerry Mina y Marlon Santos, combinadas con la llegada de Clément Lenglet, hubo unanimidad al considerar que la plantilla mejoraba sus efectivos en el eje defensivo al contar con cuatro defensas centrales del máximo nivel: Gerard Piqué, Samuel Umtiti, Thomas Vermaelen y el propio Lenglet.

Solución de urgencia

Sin embargo, las lesiones han provocado la dirección deportiva blaugrana haya tenido que centrar sus esfuerzos en la búsqueda de un refuerzo para esta demarcación, no ya a largo plazo, como es el caso de Matthjis De Ligt, sino una solución de urgencia, Jeison Murillo.

Muchos se cuestionan porqué es necesario recurrir a un jugador que no es titular en el Valencia para cubrir  las bajas de Umtiti y Vermaelen y no hay garantías con los canteranos como Chumi o Cuenca.

En todo caso, no queda más que respetar el criterio de Ernesto Valverde, que es quien a fin de cuentas debe confiar en ellos y considera que, por ejemplo Chumi, todavía deben foguearse. Ha contado con él en los dos partidos de la Copa frente a la Cultural y lo ha convocado en otros cuatro encuentros. El caso de Yerry Mina el pasado año es palmario. 

Integración

El colombiano llegó el pasado invierno como un “fichaje de club”, en palabras de Valverde, quien estimó que necesitaba tiempo para adaptarse al fútbol europeo y al estilo del Barça.

Yerry se convirtió en uno de los jugadores que integraron el ‘pack’ de traspasos al Everton junto a Lucas Digne y André Gomes, en su caso cedido con opción de compra. Tampoco se le pasó por la cabeza recuperar a Marlon Santos.

Con Vermaelen fuera de combate un mes y en la rampa de salida (a sus 33 años acaba contrato el próximo verano) y Umtiti abocado a un futuro incierto, la directiva ha decidido reclutar a Jeison Murillo, en principio para cumplir la misma función que en el Valencia, suplente. En el caso de que el colombiano se consolide, el Barça podría cerrar su contratación por unos 25 millones de euros.

Incombustible Piqué

En su caso, al parecer llega con el visto bueno del ‘Txingurri’ por lo que debería ser un relevo de su confianza para Piqué y Lenglet, titulares casi perennes. Gerard ha disputado 22 de los 25 partidos oficiales del equipo, y es, más que nunca, la referencia en defensa. Clément ha ganado protagonismo con los problemas de su compatriota y se ha confirmado como un excelente fichaje.

Los problemas surgen cuando se debe dar relevo a un tándem que ha demostrado que mezcla bien y da al equipo la solidez defensiva y la salida de balón que necesita el estilo del Barça.

Murillo, que esta temporada no estaba teniendo los minutos de juego de años anteriores con Marcelino, debería cumplir este papel, especialmente en las primeras semanas de 2019 cuando seguirá de baja Vermaelen y no se ha despejado la situación de Umtiti. 

Capacidad de adaptación

La clave es que las características del defensa colombiano se adapten a las necesidades del equipo. Se trata de un central rápido, potente, con sentido de la anticipación, pero que deberá adaptarse de manera inmediata a un estilo de juego en el que se exige, desde la portería a la punta de ataque, unas capacidades tácticas y asociativas que para muchos grandes futbolistas han sido un escollo insalvable.