Así es Mino Raiola, el agente que dificulta el fichaje de De Ligt

El agente Mino Raiola junto a Mario Balotelli

El agente Mino Raiola junto a Mario Balotelli / SPORT.es

Juan Manuel Díaz

Juan Manuel Díaz

Mino Raiola. Enfrentado en su día con Sir Alex Ferguson, Josep Guardiola o Aurelio de Laurentiis, e idolatrado por Paul Pogba, Zlatan Ibrahimovic o Mario Balotelli... y lo más relevante desde la óptica blaugrana: representante de Xavi Simmons, la perla más brillante de la cantera del FC Barcelona y de Matthijs De Ligtuno de los principales objetivos blaugrana y cuyo fichaje no está resultando sencillo.

Que el 'camuflaje' (físico y verbal) no les despiste. Raiola lleva años en la primera línea del 'mercato', y no exclusivamente por algún arranque de bravuconería en defensa de sus representados. Muy, muy lejos quedan sus inicios en las oficinas de Rob Jansen, con el que rompió relaciones de manera poco diplomática -a quién le extraña- para convertirse en el agente de futbolistas con la cartera de representados más selecta y cotizada del momento.

EL CAMUFLAJE PERFECTO

Porque hace mucho, mucho tiempo que los polos y los tejanos desgastados de Raiola dejaron de ser el camuflaje perfecto para reunirse con los ejecutivos y los directores deportivos de los 'Grandes' de Europa. Cuando en los primeros adjudicaban a Mino el apelativo del 'pizzero', le ayudaban a completar el personaje perfecto: el hijo de emigrantes de barrio que llega desde abajo hasta la cima con una mezcla de picardía, inteligencia y descaro -o llamenlo chulería. Por el camino, descubre y ayuda a chicos parecidos a él pero con mucho más talento en los pies. De su mano, forjan una carrera hacia el estrellato futbolístico y la felicidad multimillonaria.

Sin duda, los negociadores que se sientan al otro lado de la mesa de negociaciones han aprendido a matizar el personaje. Normal, porque el coste del error es muy alto: fichar al crack de turno o renovar a la promesa en ciernes puede vaciar las arcas del club. 

AMASANDO UNA FORTUNA

Por tanto, quede calro que en el mundo del fútbol todos saben muy bien quién es Carmine Raiola (Nocera Inferiore, 4 de noviembre de 1967), que emigra con su familia a Haarlem siendo un niño. De ahí que tenga la nacionalidad holandesa aunque reside en Mónaco. Todo un ciudadano europeo...

Empezó a estudiar derecho y fue promesa en las categorías inferiores del Haarlem, el club de la localidad vecina a Ámsterdam, hasta que tomó las riendas del próspero restaurante de su padre. Por supuesto, Mino debió amasar alguna pizza en la cocina, pero esencialmente amasó una pequeña gran fortuna: hizo crecer la empresa hasta poseer más de una veintena de establecimiento que después vendería a un buen precio que fue el germen de su actual imperio de la representación y el marketing.

LA CONEXIÓN

Entonces llegaría su entrada en el mundo de los representantes, utilizando sus primeros contactos futbolísticos, su facilidad para los idiomas (se hace entender en italiano, holandés, inglés, alemán, español, italiano...) y esa conexión tan particular con el futbolista, combinada con su estrategia negociadora un tanto abrupta a veces pero siempre hábil

Sus primeros éxitos, explotando su conexión italo-holandesa, fueron magníficos contratos y traspasos para Zlatan IbrahimovicMaxwell Scherrer (a los que llevó y sacó del BarçaPavel Nedved, (Balón de Oro), Balotelli le han abierto las puertas de las estrellas con más proyección de la actualidad, superando a día de hoy a todo un Jorge Mendes.   

Es indudable que Mino mantiene intacta su capacidad de conexión con las jóvenes estrellas del firmamento futbolístico, que encuentran en él más que un agente; es su asesor, el que los guía y los convierte en super-millonarios al mismo tiempo que alimenta su propia fortuna con operaciones tan espectaculares como la del fichaje de Paul Pogba por el Manchester United que le supuso ingresar una comisión casi insultante.

¿INTERÍN POR LA SANCIÓN?

Sancionado por la comisión disciplinaria de la FIFA a instancias de la Federación italiana (FIGC) durante tres meses -le acusan de irregularidades en el fichaje de un jugador de 16 años- el mercado sigue pendiente de sus movimientos. El Real Madrid quiere a Paul Pogba, el Barça a Matthijs De Ligt -Raiola cuestiona las cantidades en principio acordadas- pero también es el agente de Gianluigi Donnarumma o Blaise Matuidi, además de velar por los intereses de jóvenes promesas como Justin Kluivert, el hijo del gran delantero de Ajax, Barça o Milan Patrick, o el ya mencionado blaugrana Xavi Simons.

El Barça y su presidente, Josep Maria Bartomeu, saben muy bien a qué atenerse con Raiola para intentar llevar a buen puerto el fichaje de De Ligt. El dirigente blaugrana ya llevó en su día el fichaje y la posterior salida de Ibrahimovic, cuando Mino le aseguraba que Zlatan estaba por 'tocarle la cara' a Guardiola, entonces técnico blaugrana. "Mino es un tío muy simpático y muy divertido, pero mira su bolsillo", explicó entonces Bartomeu.